Desde la Casa Blanca, el Pentágono, líderes mundiales, activistas musulmanes y políticos de ambos partidos, al multimillonario Donald Trump le han llovido críticas por su propuesta de "un cierre total y completo al ingreso de musulmanes a Estados Unidos".
El portavoz de la Casa Blanca, Josh Earnest, dijo el martes que la retórica de Trump es tan “ofensiva y tóxica” que su plan “lo descalifica para servir como presidente” en caso de ser elegido, porque estaría violando la Constitución de Estados Unidos si lo implementa.
En el Pentágono, el portavoz Peter Cook resaltó la relación militar con las naciones musulmanas así como con los propios soldados musulmanes, señalando además las implicaciones de seguridad de cualquier cosa que ayude al grupo Estado islámico a reafirmar la idea de que Estados Unidos está en guerra con el Islam.
“Cualquier cosa que ayude a la narrativa de ISIL y ponga a Estados Unidos en contra de la fe musulmana es, ciertamente, no solo contraria a nuestros valores, sino también contraria a nuestra seguridad nacional”, dijo Cook.
El presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan, dijo que la propuesta de Trump de prohibir la llegada de musulmanes "hasta que los representantes de nuestro país determinen qué demonios sucede" no es "lo que este partido representa, y más importante: no es lo que simboliza este país".
“La libertad de culto es un principio constitucional fundamental. Es un principio fundamental de este país”, remarcó Ryan.
La propuesta del multimillonario incluso hizo coincidir a la candidata demócrata Hillary Clinton, con lo que piensa el ex vicepresidente Dick Cheney, ambos manifestándose contrarios a la idea de Trump.
Al otro lado del Atlántico, el primer ministro británico, David Cameron, dijo que la propuesta de Trump es “divisiva, estéril y simplemente bastante equivocada”.
Farhan Haq, vocero de la Organización de las Naciones Unidas, dijo que el secretario general del organismo Ban Ki-moon condenó "cualquier tipo de retórica que se apoye en islamofobia, xenofobia, y cualquier otro exhorto a odiar a cualquier grupo".
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días emitió un comunicado de apoyo a la libertad religiosa.
Incluso la autora de Harry Potter, J.K. Rowling, intervino condenando abiertamente a Trump a través de Twitter y dijo que era peor que su villano de ficción Lord Voldemort.
Trump, quien parece deleitarse con la atención, no se retractó de su propuesta el martes, y dijo que impedir la entrada de todos los musulmanes se justifica después de los ataques de extremistas musulmanes en París y el ataque de la semana pasada en San Bernardino, California, que dejó 14 muertes.
"Alguien en este país tiene que decir qué es correcto", dijo Trump en una entrevista con ABC grabada el martes.
