En las últimas horas antes de una cumbre sin precedentes con Corea del Norte, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, predijo el lunes un “buen” resultado en la que dijo que sería una “reunión muy interesante” con Kim Jong Un. El líder norcoreano pasó la jornada lejos de los reflectores.
Ambas partes pasaron las horas previas ultimando los preparativos para el encuentro, que comenzará a las 09:00 de la mañana del martes, hora local, con un apretón de manos entre Trump y Kim, una imagen que seguro recorrerá el mundo a la velocidad de la luz.
Los dos líderes tienen previsto reunirse cara a cara, acompañados únicamente por traductores, durante hasta dos horas antes de incorporar a sus respectivos asesores, dijo un funcionario estadounidense que habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizado a revelar deliberaciones internas.
La Voz de América analiza estas horas previas y los pasos que a lo largo de los años llevaron a los líderes de estas dos naciones al encuentro histórico que sostendrán, y el Coronel (r) Eric Rojo, analista en temas de seguridad nacional pone el tema en contexto destacando las expectativas que genera.
Esta será la primera reunión entre un líder norcoreano y un presidente estadounidense en activo y podría definir no solo el destino de millones de personas sino también su propio futuro político.
En Singapur, la ciudad-estado insular que sirve de sede para el encuentro, la expectación era palpable. Muchas personas esperaban el lunes en unas calles inmaculadas agitando sus celulares mientras Trump se dirigía a una reunión con el primer ministro singapurense, Lee Hsien Loong.
Durante su encuentro para almorzar en la casa Istana, Trump pareció optimista cuando dijo a Lee: “Tenemos una reunión muy interesante en especial mañana, y creo que las cosas pueden funcionar muy bien”. Antes en el día, el mandatario estadounidense tuiteó “¡La emoción está en el aire!”.
Trump dio las gracias a Lee por ejercer de anfitrión y por su “hospitalidad y profesionalismo y su amistad”.
Por otra parte, funcionarios de Washington y Pyongyang mantuvieron negociaciones en el hotel Ritz Carlton el lunes, en la víspera del encuentro que busca resolver el enfrentamiento provocado por el arsenal nuclear norcoreano. Las autoridades celebrarán una nueva ronda de contactos por la tarde.
En estas reuniones no se trataron cuestiones logísticas sino que se intentaron sentar las bases para poder lograr avances en temas importantes el martes, según el funcionario familiarizado con los preparativos.
Los delegados fijaron objetivos específicos para lo que Trump y Kim deberían tratar de conseguir, además de múltiples escenarios posibles para resolver los temas clave.
La ONU se pronuncia sobre cumbre Trump-Kim
El secreario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, se pronunció sobre la cumbre Trump-Kim respaldando la misma e hizo un pedido de ayuda para atender la crisis humanitaira.
“Las partes pertinentes del sistema de las Naciones Unidas están dispuestas a apoyar este proceso de cualquier manera, incluida la verificación si así lo solicitan las partes clave”, dijo Guterres.
Agrega que: "El Organismo Internacional de Energía Atómica tiene el mandato de aplicar salvaguardias a todos los materiales nucleares de uso pacífico, incluido todo el material eliminado de los programas militares, agrega la declaración".
La Organización del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares también podría desempeñar un papel importante en el seguimiento de la moratoria anunciada por Corea del Norte sobre las pruebas de explosivos nucleares, según el comunicado del jefe de la ONU.
El Consejo de Seguridad ha subrayado constantemente su deseo de una solución pacífica, diplomática y política de la situación, y ha instado a que se sigan trabajando para reducir las tensiones", agrega la declaración.
El secretario general de la ONU exhortó a prestar atención a la situación humanitaria en Corea del Norte y pidió 111 millones de dólares para cumplir con las inmediatas necesidades de seis millones de personas vulnerables.
Colaboración con la entrevista de Gioconda Tapia Reynolds