El gobierno del presidente Donald Trump inició el lunes el proceso para imponer un arancel del 20% a la madera canadiense de coníferas que ingrese a Estados Unidos, llevando la disputa comercial entre ambas naciones al siguiente nivel.
El presidente anunció su decisión durante una reunión en la Casa Blanca con medios de comunicación conservadores. Los comentarios iniciales de Trump fueron difundidos por cuatro personas que asistieron al encuentro y más tarde confirmados por un funcionario del gobierno.
"Impondremos un arancel del 20% a la madera de conífera que ingrese, un arancel a la madera que entre a Estados Unidos procedente de Canadá", dijo en Twitter el corresponsal de Breitbart News en la Casa Blanca, Charlie Spiering.
Más tarde, el Departamento de Comercio anunció que una decisión preliminar y la imposición de cuotas compensatorias de entre el 3% y 24% a la madera de importación, con un promedio cercano al 20%.
Una de las personas presentes en la reunión dijo que el mandatario amenazó con que los productos lácteos podrían ser los siguientes en la lista.
Estados Unidos y Canadá suelen gozar de una buena relación comercial, pero la situación se ha tensado en los últimos meses.
Trump ha criticado la decisión de Canadá de cambiar sus políticas de tasación de leche local para cubrir más ingredientes lácteos, lo que ha provocado precios más bajos para productos como la leche ultrafiltrada. Trump describió esa iniciativa como "una desgracia" que perjudica a los productores estadounidenses en estados como Wisconsin.
"Ha sido una mala semana para las relaciones comerciales entre Estados Unidos y Canadá", reconoció en un comunicado el secretario estadounidense de Comercio, Wilbur Ross. "Esa no es nuestra idea de un Acuerdo de Libre Comercio que funciona adecuadamente".
En tanto, el gobierno canadiense rechazó la medida y calificó el arancel de "injusto y punitivo".