República Dominicana estableció el martes relaciones diplomáticas con China y puso fin a las que mantenía con Taiwán, un territorio al que ya apenas reconocen una veintena de países en todo el mundo.
Los ministros de Relaciones Exteriores chino y dominicano firmaron el documento que establece su nueva relación en Pekín, en una sala decorada con los colores de China y del país caribeño.
El acuerdo "aportará enormes oportunidades para el desarrollo de República Dominicana", aseguró el ministro chino, Wang Yi, durante la ceremonia en la que sonaron los himnos de ambos países. "Esto dará un nuevo impulso a las relaciones entre China y América Latina", añadió.
"Desde este momento hemos acordado brindarnos todo el apoyo mutuo y necesario para la instalación de manera pronta y recíproca de nuestras embajadas en nuestras respectivas capitales", declaró el ministro dominicano de Relaciones Exteriores, Miguel Vargas.
"La República Dominicana reconoce el principio de una sola China y rompe las relaciones diplomáticas con Taiwán, que forma parte inalienable de China, y no se mantendrá ningún tipo de relaciones o contactos oficiales", agregó el ministro.
China y Taiwán están dirigidas por regímenes rivales desde el final de la guerra civil china en 1949. La isla goza de un gobierno autónomo, pero jamás declaró su independencia.
Taiwán ya sólo puede contar con el reconocimiento oficial de 19 Estados, entre ellos el Vaticano, además de cinco en América Central —Nicaragua, Honduras, El Salvador, Guatemala, y Belize—, seis en el Caribe —Haití, República Dominicana, Federación de San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas—, Paraguay en América del Sur y seis en Oceanía —Palau, Islas Marshall, Kiribati, Nauru, Islas Salomón, Tuvalu.
Tras Santo Tomé y Príncipe en 2016, Panamá había sido en 2017 el último país en romper con Taiwán para establecer relaciones diplomáticas con China.
Con información de AFP.