El dólar caía levemente el martes frente al yen, lo que sugería que los inversores se encontraban escépticos sobre el optimismo expresado por el presidente Donald Trump, ante la posibilidad de un acuerdo comercial entre Estados Unidos y China.
Mientras la divisa japonesa subía, los retornos de los bonos del Tesoro estadounidense a 10 años caían, debido a que los inversores se acercaban a activos más seguros.
La situación se presentó días después de China y Estados Unidos anunciaron nuevos aranceles.
El viernes, China dijo que aumentaría sus tarifas a bienes estadounidenses con un valor de 75.000 millones de dólares. En represalia, Estados Unidos dijo que elevaría sus gravámenes existentes sobre productos chinos valorados en 250.000 millones de dólares, a un 30 por ciento desde un 25 por ciento, a partir del primero de octubre.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, también dijo que aplicaría un impuesto de 15 por ciento a otras importaciones procedentes de China, con un valor de 300.000 millones de dólares, en lugar del 10 por ciento que había planeado inicialmente. La medida entraría en vigor a partir del primero de septiembre.
El lunes, en el marco de la cumbre del G-7 en Francia, el presidente Donald Trump aseguró que funcionarios chinos se pusieron en contacto con autoridades de Estados Unidos y ofrecieron volver a la mesa de negociación.
Dichos comentarios generaron incertidumbre sobre posibles riesgos, que inicialmente impulsaron al dólar, debilitaron las monedas de refugio y apuntalaron a los mercados bursátiles.
Sin embargo, las dudas aumentaron después de que el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino dijo que no tenía conocimiento de que se haya realizado una llamada telefónica, que el presidente Donald Trump mencionó durante la Cumbre del G7. El Ministerio de Comercio de EE.UU., que emite comunicados sobre conversaciones, no respondió a un pedido de comentarios.
La moneda japonesa ganaba un 0,3 por ciento a 105,755 yenes por dólar. El alza era menor a la del lunes, cuando tocó un máximo de tres años excluyendo una variación breve de enero.
El yen ha subido en un 3,5 por ciento frente al dólar en lo que va del año, en medio de la guerra comercial entre Washington y Beijing.
Los rendimientos de los bonos del Tesoro de Estados Unidos a 10 años caían a 1,5030 por ciento, lo que mantenía invertida la curva de retornos debido a que la deuda a dos años operaba en 1,5182 por ciento, clara señal de una recesión cercana.
El yuan en los mercados internacionales, sensible a la disputa comercial entre Estados Unidos y China, operaba estable a 7,1694 unidades por dólar luego de hundirse a un mínimo histórico de 7,1870 en la víspera.
El euro cotizaba en 1,1103 dólares, mientras los actores del mercado buscaban señales, de si las negociaciones entre el Movimiento 5 Estrellas y el Partido Demócrata resultarían en la formación de un gobierno de coalición en Italia.
El índice dólar, que mide su desempeño frente a una cesta de seis divisas, caía un 0,2 por ciento a 97,919.