El gobierno de Estados Unidos afirmó que no va a permitir que una "parálisis diplomática" en Naciones Unidas evitar que produzca una respuesta por el uso de armas químicas en Siria.
La portavoz del departamento de Estado, Marie Harf, dijo que Estados Unidos no ve alternativas respecto a una acción contra el gobierno de Siria, debido a la oposición de Rusia a cualquier acción significativa.
Sin embargo, la funcionaria estadounidense dijo que el gobierno sirio no puede seguir escondiéndose detrás de Rusia. Harf agregó que el gobierno del presidente Barack Obama está en consultas con sus aliados, analizando un ataque militar contra Siria.
La cancillería de Rusia, mientras tanto, sostiene que cualquier acción de ONU sobre Siria antes de que los inspectores de armas químicas en Damasco terminen su trabajo, sería prematura.
Silencio de diplomáticos
Los representantes diplomáticos Estados Unidos, Rusia, Francia, China y Gran Bretaña (P-5), ante Naciones Unidas, iniciaron las conversaciones sobre un proyecto de resolución presentado por los británicos, donde solicita al organismo mundial "hacer lo que sea necesario" para proteger a los civiles y prevenir nuevos ataques.
Sin embargo, al final del encuentro no hubo comentarios de parte de los diplomáticos sobre la propuesta. Gran Bretaña sigue presionando por el voto del Consejo de Seguridad de ONU sobre la medida, en lo que sería el preludio de una posible acción militar contra Siria.
"Creemos que ha llegado el momento el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas asuma sus responsabilidades en Siria" dijo el secretario de Relaciones Exteriores, británico William Hague.
El corresponsal de la Voz de América ante Naciones Unidas dijo que los diplomáticos del P-5 no hicieron comentarios tras la sesión y que los representantes de Rusia y China salieron antes que el resto de los enviados.
Tanto Rusia como China se oponen a sancionar al régimen sirio por presuntos abusos cometidos durante la guerra civil. La resolución propuesta es parte de un esfuerzo diplomático internacional liderado por Estados Unidos y las potencias occidentales antes de una posible acción militar contra el presidente Bashar al-Assad.
Lea además: Siria: ONU halla evidencia de "sustancia" química
La portavoz del departamento de Estado, Marie Harf, dijo que Estados Unidos no ve alternativas respecto a una acción contra el gobierno de Siria, debido a la oposición de Rusia a cualquier acción significativa.
Sin embargo, la funcionaria estadounidense dijo que el gobierno sirio no puede seguir escondiéndose detrás de Rusia. Harf agregó que el gobierno del presidente Barack Obama está en consultas con sus aliados, analizando un ataque militar contra Siria.
La cancillería de Rusia, mientras tanto, sostiene que cualquier acción de ONU sobre Siria antes de que los inspectores de armas químicas en Damasco terminen su trabajo, sería prematura.
Silencio de diplomáticos
Los representantes diplomáticos Estados Unidos, Rusia, Francia, China y Gran Bretaña (P-5), ante Naciones Unidas, iniciaron las conversaciones sobre un proyecto de resolución presentado por los británicos, donde solicita al organismo mundial "hacer lo que sea necesario" para proteger a los civiles y prevenir nuevos ataques.
Sin embargo, al final del encuentro no hubo comentarios de parte de los diplomáticos sobre la propuesta. Gran Bretaña sigue presionando por el voto del Consejo de Seguridad de ONU sobre la medida, en lo que sería el preludio de una posible acción militar contra Siria.
"Creemos que ha llegado el momento el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas asuma sus responsabilidades en Siria" dijo el secretario de Relaciones Exteriores, británico William Hague.
El corresponsal de la Voz de América ante Naciones Unidas dijo que los diplomáticos del P-5 no hicieron comentarios tras la sesión y que los representantes de Rusia y China salieron antes que el resto de los enviados.
Tanto Rusia como China se oponen a sancionar al régimen sirio por presuntos abusos cometidos durante la guerra civil. La resolución propuesta es parte de un esfuerzo diplomático internacional liderado por Estados Unidos y las potencias occidentales antes de una posible acción militar contra el presidente Bashar al-Assad.
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