En una medida de presión sin precedentes, líderes antidopaje de 14 naciones pidieron al Comité Olímpico Internacional (COI), que se prohiba al Comité Olímpico Ruso y a sus atletas competir en los próximos Juegos Olímpicos en Río de Janeiro.
En una carta al presidente del COI, Thomas Bach, los dirigentes exigen "tomar pronta acción...(para) provisionalmente negar la entrada a todos los atletas rusos", pero ofrecieron una oportunidad a los deportistas rusos que han pasado las pruebas de dopaje fuera de Rusia.
Esa oportunidad es que cumplan con "un grupo de requisitos" que podría permitirles competir en Río bajo una bandera neutral. El esfuerzo para marginar a Rusia de Río está liderado por 9 naciones europeas, incluidas Alemania, Austria, Dinamarca, Finlandia, Holanda, Noruega, España, Suecia y Suiza.
Estados Unidos, Canadá, Egipto, Japón y Nueva Zelanda apoyan la medida.
Alexander Zhukov, el principal funcionario olímpico de Rusia dijo que espera que para el domingo se decida si toda la delegación rusa será marginada de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro por un escándalo de dopaje.
El Comité Olímpico Internacional, COI, examina las alternativas legales después que un informe del investigador de la Agencia Mundial Antidopaje (AMA), Richard McLaren, imputara al Ministerio de Deportes de Rusia de supervisar el dopaje sistemático de atletas olímpicos del país.
Zhukov no descartó emprender medidas legales si Rusia es marginada de los Juegos.
El Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) emitirá su fallo el jueves sobre la apelación de Rusia para que se revoque una suspensión de la federación internacional de atletismo (IAAF) a todos sus competidores de pista y campo. El COI tomará en cuenta ese veredicto antes de emitir su propia decisión.