Un total de 680 personas fueron arrestadas la semana pasada en diversas redadas contra inmigrantes que viven de manera ilegal en Estados Unidos, dijo el Departamento de Seguridad Nacional (HSD).
La cifra es muy inferior a la de operaciones similares efectuadas durante el gobierno de Obama. Y aunque la Casa Blanca se adjudicó los arrestos, el HSD aseguró que son de rutina.
El Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE) se ha enfocado en inmigrantes que representen una amenaza para la seguridad pública, entre ellos delincuentes convictos y miembros de pandillas, dijo el secretario de Seguridad Nacional, John Kelly.
Afirmó que 75% de los detenidos eran personas implicadas en un delito y algunos estaban sentenciados por homicidio y agresión sexual agravada.
Según funcionarios del ICE, 161 personas de 13 países fueron arrestadas en la zona metropolitana de Los Ángeles y todas, salvo 10, eran delincuentes convictos. Más de 100 de ellas provenían de México.
En Georgia, Carolina del Norte y Carolina del Sur, fueron arrestados 190 inmigrantes, de los cuales 127 eran delincuentes convictos.
Kelly dijo que los agentes también efectuaron detenciones en Nueva York, Atlanta, Chicago y San Antonio.
No había detalles disponibles sobre los arrestados, pero las detenciones y los rumores sobre otras redadas causaron temor y confusión entre los inmigrantes.
Defensores de los inmigrantes y la Casa Blanca han dejado entrever que los arrestos son preludio del compromiso del presidente Donald Trump de deportar a inmigrantes implicados en delitos y otros que viven sin permiso en Estados Unidos.
"Yo dije al principio que iríamos por los malos, los verdaderos malos, y los vamos a sacar", afirmó Trump en conferencia de prensa con el primer ministro canadiense Justin Trudeau.
Sin embargo, funcionarios del ICE y Kelly dijeron que los arrestos eran parte de las acciones de rutina de la agencia.
Hubo mayores arrestos en redadas similares efectuadas durante el gobierno del presidente Barack Obama.
En marzo de 2015, el ICE dijo que en redadas efectuadas durante cinco días hubo más de 2.000 detenciones.