En la respuesta demócrata al discurso sobre el Estado de la Unión del presidente Donald Trump, Stacey Abrams pidió un "compromiso renovado con la justicia social y económica" como una forma de fortalecer el país.
Abrams, quien perdió por estrecho margen la elección para gobernador en el sureño estado de Georgia en noviembre, dijo que si bien está "muy decepcionada" por el enfoque del presidente a los problemas del país, no quiere que él fracase.
"Pero necesitamos que diga la verdad y que respete sus deberes y respete la extraordinaria diversidad que define a Estados Unidos. Nuestro progreso siempre se ha encontrado en el refugio, en el instinto básico del experimento estadounidense, de hacer lo correcto por nuestro pueblo”.
Abrams criticó al presidente por el largo cierre parcial del gobierno que terminó a fines de enero con un acuerdo para que demócratas y republicanos trabajen durante varias semanas para lograr un acuerdo sobre medidas de seguridad fronteriza.
También enfocó parte de su discurso en los derechos al voto, una parte clave de su campaña para gobernadora, y dijo que la base del liderazgo de Estados Unidos en todo el mundo está en "elecciones libres y justas, donde los votantes eligen a sus líderes, no donde los políticos eligen a sus votantes".
Abrams dijo que los derechos de voto son "la próxima batalla para nuestra democracia", e instó a los estadounidenses a "rechazar el cinismo que dice permitir que cada voto elegible se emita y se cuente es una 'toma de poder".
