El déficit del presupuesto del año fiscal 2014 fue de $483.000 millones de dólares, el más bajo en los seis años de la administración de Barack Obama, se informó el miércoles.
Es el menor desde 2008 y, medido en comparación con la economía, está por debajo del déficit promedio de las últimas cuatro décadas.
El déficit equivalió al 2,8% del Producto Interno Bruto, la suma total de bienes y servicios.
En comparación, el déficit para 2013 fue de $680.000 millones, un 4,1% del PIB.
En términos simples, esto significa que el gobierno toma prestados 14 centavos por cada dólar que gasta; hace seis años eran 40 centavos.
"Es el retorno a la normalidad fiscal", afirmó el director de presupuesto de la Casa Blanca, Shaun Donovan.
Pero algunos ven riesgos en el futuro.
El retiro de la generación de posguerra presumiblemente aumentará el déficit en los próximos años.
La Oficina de Presupuesto del Congreso informó que la trayectoria actual es insostenible y podría provocar una crisis fiscal.
Por ahora, el lento crecimiento en el gasto gubernamental y los mayores ingresos por impuestos están generando cifras promisorias.
Jacob Lew, secretario del Departamento del Tesoro, informó que la cifra indica una economía mucho más saludable que cuando Obama asumió en 2009.
Lew saludó “la reducción más acelerada en el déficit del presupuesto desde la Segunda Guerra Mundial”.
Obama heredó de George W. Bush una economía en recesión. El déficit era de billones de dólares por cada uno de sus cuatro primeros años en el cargo, incluso un récord de $1,4 billones en 2009.