Un juez federal estadounidense ordenó que los 21 migrantes cubanos que llegaron hasta un faro en los Cayos de Florida el mes pasado, deben regresar a la isla.
El juez Darrin Gayles aseguró que el faro American Shoal, no cuenta como tierra firme bajo la ley estadounidense conocida como "pies mojados, pies secos" aplicada a migrantes cubanos, y por tanto, deben ser repatriados.
Abogados de los migrantes habían argumentado que el faro es territorio estadounidense y que sus representados deberían ser autorizados a quedarse en el país.
Pero abogados del gobierno federal admitieron que aunque el faro es propiedad estadounidense, no equivalía a tierra firme.
El faro está ubicado a 11 kilómetros del cayo Sugarloaf. Bajo la política de "pies mojados, pies secos", los cubanos que llegan a las costas estadounidenses son autorizados a quedarse, mientras que los que son interceptados en el mar son repatriados.
Los migrantes habían estado a bordo de una embarcación de la Guardia Costera desde el 20 de mayo.