El gobierno de Cuba negó que la salud del contratista estadounidense Alan Gross se haya deteriorado significativamente y dijo que a él se le “mantiene en un hospital militar, no porque su estado de salud lo requiera, sino para asegurar las mejores condiciones de internamiento”.
Cuba finalmente entregó el viernes los resultados de los exámenes médicos practicados a Gross, quien ha estado encarcelado en la isla desde 2009, y que la familia había estado solicitando desde hacía un mes.
En un comunicado, el abogado de la familia Gross, Peter Khan, mostró su "gratitud porque el Gobierno cubano haya decidido divulgar finalmente hoy el historial médico y los resultados de los exámenes médicos".
"Es desafortunado que les haya llevado más de un mes hacerlo, pese a nuestras repetidas solicitudes", añadió Khan, quien evitó comentar sobre los documentos médicos "hasta que los médicos de Alan en Estados Unidos hayan tenido la oportunidad de revisar y analizarlos".
El ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba replicó el viernes que el estado de salud de Gross es "normal" y que sus familiares han recibido "sistemáticamente" información médica completa del contratista.
Gross “padece de enfermedades crónicas propias de su edad, para las cuales recibe tratamiento. Tiene una alimentación sana y balanceada”, sostuvo el gobierno cubano.
“Mantiene un régimen elevado de ejercicios, que demuestra su buen estado general de salud”, agrega la nota.
Pero Kahn rechazó esa afirmación al asegurar que las imágenes de Gross que han circulado en los medios, que le muestran visiblemente delgado, respaldan su versión de los hechos.
"Cualquiera que haya visto las crudas fotografías de Alan comprende la legítima preocupación de su familia por su bienestar físico y mental", aseguró Khan.
Gross fue arrestado al ingresar clandestinamente equipos de telecomunicaciones satelitales con los cuales buscaba construir redes de internet sin autorización.
El estadounidense trabajaba para la empresa Development Associates International, una firma que presta servicios a la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), y que según las autoridades cubanas desarrolla programas para financiar una oposición artificial en Cuba y con el objetivo de lograr cambios en su sistema político.
Cuba finalmente entregó el viernes los resultados de los exámenes médicos practicados a Gross, quien ha estado encarcelado en la isla desde 2009, y que la familia había estado solicitando desde hacía un mes.
En un comunicado, el abogado de la familia Gross, Peter Khan, mostró su "gratitud porque el Gobierno cubano haya decidido divulgar finalmente hoy el historial médico y los resultados de los exámenes médicos".
"Es desafortunado que les haya llevado más de un mes hacerlo, pese a nuestras repetidas solicitudes", añadió Khan, quien evitó comentar sobre los documentos médicos "hasta que los médicos de Alan en Estados Unidos hayan tenido la oportunidad de revisar y analizarlos".
El ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba replicó el viernes que el estado de salud de Gross es "normal" y que sus familiares han recibido "sistemáticamente" información médica completa del contratista.
Gross “padece de enfermedades crónicas propias de su edad, para las cuales recibe tratamiento. Tiene una alimentación sana y balanceada”, sostuvo el gobierno cubano.
“Mantiene un régimen elevado de ejercicios, que demuestra su buen estado general de salud”, agrega la nota.
Pero Kahn rechazó esa afirmación al asegurar que las imágenes de Gross que han circulado en los medios, que le muestran visiblemente delgado, respaldan su versión de los hechos.
"Cualquiera que haya visto las crudas fotografías de Alan comprende la legítima preocupación de su familia por su bienestar físico y mental", aseguró Khan.
Gross fue arrestado al ingresar clandestinamente equipos de telecomunicaciones satelitales con los cuales buscaba construir redes de internet sin autorización.
El estadounidense trabajaba para la empresa Development Associates International, una firma que presta servicios a la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), y que según las autoridades cubanas desarrolla programas para financiar una oposición artificial en Cuba y con el objetivo de lograr cambios en su sistema político.