Chris Christie y Andrew Cuomo, gobernadores de Nueva Jersey y Nueva York, respectivamente, pondrán en cuarentena obligatoria de 21 días a las misiones de ayuda contra el ébola que regresen a Estados Unidos.
Ambos funcionarios ordenaron a las autoridades en los aeropuertos internacionales de sus ciudades identificar y aislar a los médicos y personal médico que tuvo contacto de cualquier tipo con pacientes de ébola en África Occidental.
El CDC informó en un comunicado que su tarea es establecer recomendaciones, “pero los funcionarios estatales y locales tienen la prerrogativa de ajustar el régimen como mejor les parezca”.
La agencia agregó que “cuando se trata de normas federales establecidas por el CDC, vamos a considerar las medidas que creemos tienen el potencial proteger al pueblo estadounidense”.
La drástica decisión llega luego de que un médico estadounidense que ayudó a las víctimas de ébola en Guinea rdiera positivo por el virus en Nueva York.
Antes de empezar a sufrir de los síntomas y ser diagnosticado con la enfermedad, el doctor Craig Spencer utilizó el sistema de Metro de la ciudad, se subió en un taxi, comió en un restaurante e incluso jugó boliche con algunos amigos la noche anterior a ser diagnosticado.
Actualmente hay tres individuos en cuarentena en Nueva York por el contacto que tuvieron con Spencer.
Tanto médicos como algunos miembros del Congreso concuerdan en que todos aquellos que han tenido contacto con personas infectadas de ébola y que intentan entrar al país deben ser inmediatamente puestos en cuarentena de tres semanas.
Hasta el momento, unas 4.900 personas han muerto de Ébola principalmente en la República de Guinea, Sierra Leona y Liberia.