Cientos de miles de personas que son parte de la minoría cristiana en Egipto, salieron a las calles de la capital, El Cairo, para demostrar su enojo ante el fracaso de las autoridades para protegerlos.
Los manifestantes atacaron coches del ministerio de gobierno y se enfrentaron con la policía en las afueras de la Catedral San Marcos de El Cairo.
También se registraron manifestaciones en las calles en la ciudad de Alexandria, donde un aparente ataque suicida con bombas en contra de una Iglesia Cóptica, el día de Año Nuevo, dejó 21 muertos y cantidades de heridos entre sus fieles.
Las autoridades de seguridad de Egipto dijeron que militantes locales inspirados por al Qaeda, podrían ser los responsables del ataque.
Las autoridades también señalaron que están investigando al grupo radical Musulmán Salafi Sunni, con base en Alexandria.
