La consulta popular se complica para el presidente de Ecuador, Rafael Correa, quien se ha empeñado en sacar adelante las diez preguntas que necesitan la aprobación de la Corte Constitucional.
Cumpliendo los tiempos de análisis, dos de los jueces del Organismo se pronunciaron sobre las preguntas y cuatro de las cinco que tuvo que analizar la jueza Nina Pacari, ex canciller del gobierno del ex presidente Lucio Gutiérrez, fueron rechazadas.
Esto fue criticado fuertemente por el presidente Correa quien no dudó en mencionar que el dictamen de la jueza corresponde a intereses políticos. “Primero el informe no es vinculante. Segundo, no decían que la primera pregunta es inconstitucional, por tanto, que se ponga de acuerdo al menos para mentir” dijo el mandatario.
También dijo que esperaba “cualquier cosa de la señora Pacari, porque está claro que es dirigente de un partido de oposición irreflexiva, esa oposición antidemocrática que ya se pronunció por el no”.
Pacari no tiene la última palabra sin embargo su análisis pesa al momento de la decisión general del pleno.
La ex canciller menciona entre sus argumentos para juzgar si las preguntas deben ir o no a consulta y defiende que las cuatro que ha negado son inconstitucionales.
La segunda tiene que ver con la prisión preventiva, la tercera hace referencia al conflicto de intereses de los dueños de medios de comunicación, la cuarta refiere al Consejo Nacional de la Judicatura y su posible reemplazo por una comisión especial designada entre otros organismos por el ejecutivo y la quinta tiene que ver con la modificación del Código Orgánico de la Función Judicial.
La jueza Pacari menciona que la única manera en la que se puede proceder a la consulta popular es si estas preguntas son analizadas por una Asamblea Constituyente.
Cabe recordar que la actual Constitución fue modificada en la Asamblea Constituyente que se reunió en Montecristi, en noviembre del año 2007, y que fue promovida por el propio presidente Correa y quienes lo apoyaban en ese momento, algunos de ellos hoy se han separado de la bancada oficialista, justamente por no estar de acuerdo con la convocatoria a consulta popular.
