Los líderes de los países que conforman el G7 dijeron el lunes que están comprometidos a hacer "lo que sea necesario" para coordinar una respuesta global fuerte ante la pandemia causada por el nuevo coronavirus.
"Actuando juntos, trabajaremos para resolver los riesgos económicos y de salud causados por la pandemia del COVID-19", dijeron los integrantes del grupo de naciones en un comunicado conjunto distribuido por la Casa Blanca, después de haber mantenido una reunión por videoconferencia.
Los líderes de las siete economías más poderosas del mundo se comprometieron a tomar medidas de control de fronteras "apropiadas" para controlar la propagación del virus, así como a compartir datos de la epidemia en cada país y coordinar las estrategias económicas a través de los bancos centrales y ministros de finanzas de cada gobierno.
Asimismo, expresaron su deseo de trabajar conjuntamente para "restaurar la confianza, el crecimiento y proteger los trabajos", así como para garantizar el comercio mundial y las inversiones.
En una rueda de prensa en la Casa Blanca, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump dijo que la teleconferencia había sido "muy productiva" y subrayó la "dura" labor de los países frente a la epidemia.
El viernes, el mismo día en que se declaró el estado de emergencia nacional en Estados Unidos, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, adelantó que los líderes se iban a reunir de manera virtual después del fin de semana.
Se han reportado casos de coronavirus en todos los países miembros del G7, siendo hasta ahora Italia el más afectado, con casi 28 mil infectados y 1,809 muertos.
El próximo encuentro del G7 está programado para junio del 2020 en Camp David, una de las residencias del presidente de EE.UU.
Trump dijo que durante la reunión virtual del lunes que los líderes no discutieron si la cumbre todavía sigue en pie, sin embargo afirmó: "Parece que EE.UU. todavía podrá recibir al G7".