La justicia francesa declara culpable a la aerolínea Continental por homicidio imprudente por el accidente que dejó 113 muertos en el año 2000.
Un fallo en uno de sus aviones dejó caer una pieza de metal en la pista de aterrizaje del aeropuerto Charles de Gaulle, en París, causando el desplome del jet Concorde de Air France.
Según el veredicto, la aerolínea con sede en Houston deberá indemnizar a Air France con $1,43 millones de dólares por daños a la reputación de la aerolínea francesa, así como pagar una multa de $265.000 dólares.
Los investigadores señalaron que los restos causaron cortes en un neumático del Concorde y, enviaron pedazos de goma hacia el tanque de combustible que provocó un incendio. El avión chocó con un hotel cercano, matando a todos los 109 ocupantes a bordo y cuatro personas en tierra.
Continental había negado cualquier responsabilidad en el accidente.