Altos funcionarios de las agencias involucradas en responder a la crisis humanitaria provocada por la llegada de más de 52.000 niños solos por la frontera sur con México respondieron el miércoles a las interrogantes de los legisladores en el Congreso.
Las autoridades participaron en la audiencia denominada “Retos en la frontera: Examinando las causas, consecuencias y respuestas por el aumento de aprehensiones en la frontera sur”, en la que señalaron que han puesto en marcha una serie de esfuerzos para frenar el ingreso ilegal de niños y garantizar la asistencia y el proceso legal de los menores.
Las críticas de los legisladores recaen en cómo se ha respondido a esta crisis, especificamente por la demora en los procesos y en las condiciones en que se mantienen a estos niños en custodia.
“Hemos tenido progresos, pero ese progreso es a veces interrumpido cuando de repente vemos un aumento de niños llegando tan rápido que volvemos a retrasarnos" dijo el administrador de la Agencia del Manejo de Emergencias (FEMA, por sus siglas en inglés), Craig Fugate.
La autoridad agregó que "la semana pasada los números bajaron, pero no podemos asegurar todavía que un niño está en un centro de detención por no más de 24 horas y en custodia de la patrulla fronteriza por no más de 72 horas”.
Por otra parte, algunos legisladores expresaron que su mayor preocupación es que los niños son liberados o entregados a sus familiares con una cita pendiente ante un juez de inmigración, pero en su gran mayoría nunca se presentan.
También cuestionaron si preguntan por el estatus legal del familiar que recibe al menor de edad.
“Nosotros no verificamos el estatus legal del pariente que recoge a un menor de edad. Nuestro interés en la liberación es identificar la manera menos restrictiva en función del interés del menor”, dijo el secretario asistente interino del Departamento de Salud y Recursos Humanos de EE.UU., Mark Greenberg.
Durante la audiencia también se mencionó el trabajo que se realiza en los países involucrados como El Salvador, Guatemala y Honduras, pero no se tomó ninguna decisión sobre la asignación de los casi $4 mil millones de dólares que solicitó el martes el presidente Barack Obama al Congreso para enfrentar la crisis en la frontera.