Una comisión de investigación de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, controlada por los republicanos, inició el jueves una investigación de juicio político contra el presidente Joe Biden.
En sus comentarios de apertura, el presidente de la Comisión de Supervisión de la Cámara de Representantes, James Comer, alegó que nueve miembros de la familia Biden obtuvieron dinero en efectivo de los acuerdos de Hunter Biden en Ucrania y China entre 2014 y 2019; y sostuvo que los estadounidenses merecen saber si el mandatario se benefició personalmente de los 20 millones de dólares que le pagaron a su hijo.
“¿Qué vendían los Biden?” preguntó Comer. "Los estadounidenses exigen responsabilidad por esta cultura de corrupción".
Sin embargo, Comer no acusó directamente de actuar mal al presidente Biden, quien ha asegurado que no se benefició de los acuerdos de su hijo en el extranjero. Hace unas semanas, Biden se rió de la sugerencia de que su cuenta bancaria recibió fondos de su hijo y dijo: "¿Dónde está el dinero?".
En cambio, han surgido evidencias de que el hijo del mandatario, de 53 años de edad, a menudo llamaba a su padre desde restaurantes mientras cenaba con socios comerciales, tal vez para impresionarlos sobre el poder político de su familia en Washington.
Devon Archer, un asociado de Hunter Biden, testificó que las charlas entre los Biden se centraban en el clima o en lugares remotos donde él y sus socios comerciales comían, no en transacciones comerciales.
El representante Jamie Raskin, principal demócrata en el panel de investigación, al comienzo de la investigación republicana aseguró: “No hay ni la más mínima prueba contra el presidente Biden”.
Antes de la audiencia, Comer aseveró que el panel de investigación “presentaría pruebas las descubiertas hasta la fecha y escucharía a expertos legales y financieros sobre los crímenes que los Biden pueden haber cometido”.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo a los periodistas a principios de este mes que la iniciativa republicana de juicio político es una “investigación infundada de la que los republicanos de la Cámara ni siquiera pueden defenderse por sí mismos”.
"Las pruebas no existen y esto es una treta política", afirmó Jean-Pierre. Algunos demócratas han dicho que la investigación es una venganza por los juicios políticos en la Cámara contra el expresidente Donald Trump, aunque luego el Senado lo absolvió dos veces.
El presidente republicano de la Cámara de Representantes, Kevin McCarthy, lanzó la investigación de juicio político este mes centrándose en los negocios extranjeros de Hunter Biden. McCarthy ordenó unilateralmente la investigación, pero al carecer de los votos para su aprobación, no buscó una votación del pleno de la Cámara de Representantes para abrir la indagación.