Aunque Colombia atraviesa un periodo de transformaciones en materia económica, debido al cambio de gobierno, con sus nuevas propuestas y las reformas que se tramitan en el legislativo, analistas coincidieron este martes en que es uno de los países con más progreso y oportunidades, en esta materia, en América Latina.
Susan Segal, presidenta y CEO de a Sociedad de las Américas/Consejo de las Américas (AS/COA, por sus siglas en ingles), indicó que “frente al mundo, Colombia se presenta como un país estable, siempre con desafíos pero comprometido con la transparencia, el estado de derecho y la institucionalidad democrática y el respeto por los derechos humanos”. Además, que cuenta con una red de tratado de libre comercio y es un destino para la inversión.
“Colombia tiene lo que necesita para prosperar en este mundo cambiante”, agregó, durante la presentación del Seminario internacional 'La economía colombiana. ¿Cómo nos ven en momentos de cambio?', organizado por la AS/COA y la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF).
Para Segal, Colombia tiene una gran la posibilidad de desarrollar más su ecosistema de emprendedores y “la oportunidad de convertirse en un destino para las cadenas de suministro, cadenas de valor”, teniendo en cuenta una ventaja, agregó, que son los tratados de libre comercio con los que cuenta el país.
Segal también resaltó la relación “estable” que tiene el país con EEUU.
Por otro lado, Diego Mora, Country Manager para Colombia, Perú y Centroamérica de BlackRock, el gobierno colombiano se enfrenta a “un escenario fiscal retador, con un presupuesto fiscal cada vez más restringido, con lo cual la herramienta que suelen optar los gobiernos” es encontrar “mecanismos para canalizar recursos privados para inversión en infraestructura”.
Resaltó, como hicieron otros analistas, la fuerte institucionalidad del país, un tema en el que Colombia “tiene una posición privilegiada, no solamente a nivel regional, sino global”, y que puede ayudar a esta canalización de recursos, pero que es un proceso que, en el mejor panorama, puede tardar cinco años.
Los desafíos
Alexander Müller, director y economista jefe para la Región Andina, Centroamérica y el Caribe de Bank of America, enfatizó que la economía colombiana “va perdiendo atracción con prospectos moderados para los siguientes años”, pero resaltó que la política fiscal y las cuentas externas son aspectos positivos que están generando confianza en los Estados. No obstante, si no reduce su deuda a un rango prudente (40-50 %), agregó, “podría entrar al baile de países donde la política fiscal no existe".
Colombia también es el país más desigual del mundo, a nivel regional y de ingresos, y para corregir este tema, se necesita una política fiscal clara, según dijo Ramiro López Ghio, representante del Grupo BID en Colombia.
Por eso, enfatizó en que es necesario apostar por el empleo, la productividad y la educación, y “para tener empresas más grandes, a formalizar”.
Y aunque señaló que, en materia macro-fiscal, aún hay muchos desafíos a mediano plazo, comparado con la región “tan mal no estamos”. “Más complicado están países de la región, cuya carga tributaria esta al 30% y es muy de difícil reducirla”, añadió.
A nivel interno
A nivel internacional, Colombia es vista “con muy buenos ojos", pues es "el segundo país con mayor crecimiento de la región”, pero aún "falta trabajar para nuestras necesidades internas", según afirmó María Claudia Lacouture, directora Ejecutiva de Amcham Colombia.
Mauricio Santa María, presidente de la ANIF, dijo que internamente se ven “bastantes nubarrones” que preocupan a futuro influenciados, en gran parte, por el orden político.
El primero está relacionado con el tema fiscal, es decir, con “consolidar las finanzas de manera responsable”. Otro aspecto es generar empleo, en un escenario de bajo crecimiento, así como ciertas reformas que, según Santa María, son preocupantes: la pensional y la de la salud. Y la “poca claridad” de la transición energética, uno de los pilares del gobierno de Gustavo Petro. Según afirmó el experto, es un tema en el que se pueden “aprovechar las oportunidades de transición, pero con cautela”.
Para Juan Carlos Echeverry, exministro de Hacienda de Colombia, el presidente Gustavo Petro “manejó bien su política, en su primer trimestre, pero se agrió cuando empezó a pelar con todo el mundo”. Además, habló de una paz total y unas fuerzas militares que “van mal”.
No obstante, señaló que, aunque “la política se ha deteriorado, la economía sí va hacia un equilibrio” en este y el próximo año. Otro factor que resaltó es la fortaleza de las instituciones, pero enfatizó en el gran desafío de seguridad y disfuncionalidad de la política pueden amenazarla.
La polémica transición energética
El presidente Gustavo Petro ha propuesto, lo que ha denominado, avanzar hacia la transición energética justa, basada en la descarbonización, mayor inversión en energías limpias y mayor eficiencia energética, y sustitución progresiva de la demanda de combustible fósiles.
Al respecto, el exministro Echeverry dijo, aunque hay un contante interés a nivel mundial de reemplazar el petróleo por fuentes renovables, esto “no se logra con base a decisiones gubernamentales y metas para dos o tres décadas”, pues el mundo depende en un gran porcentaje de los combustibles fósiles.
María Fernanda Suárez, presidenta de Accenture y exministra de Minas y Energía, agregó que el objetivo de renunciar a los hidrocarburos e impulsar las enérgicas renovables estaba ya en marcha y lo que le compete a este gobierno es que los proyectos se ejecuten: “Tenemos una transición energética de papel porque los proyectos no se están pudiendo hacer”.
En este sentido, hay una gran oportunidad en América Latina, para “contribuir a la mitigación del cambio climático sin… dejar de apuntar al crecimiento”, según López, pues el 30 % de la región cuenta con energías renovables, el doble que el nivel mundial.
El viceministro general de Hacienda y Crédito Público de Colombia, Diego Guevara, en materia de transición energética, dijo que el reto es la diversificación y es un tema que “debe ir de la mano de una transición exportadora y una transición fiscal”.
El trabajo del gobierno
Guevera explicó que el gobierno y el Banco de la República han respondido al contexto inflacionario: “En junio, la inflación continuó descendiendo, tendencia que se espera continué en los próximos meses” y agregó que existe un “panorama macro que muestra recuperación y confianza”.
En términos de este panorama, dijo que el gobierno se mantiene en una exceptiva de crecimiento en un 1, 8 % y resaltó que su país es uno de los lideres de la reactivación después de la pandemia. “Esperamos en el 24 tener un mejor repunte para que definitivamente 25 y 26 sean los años de crecimiento nuevamente, superiores al 3 %”, agregó.
También habló de una reforma tributaria “progresiva e interesante” que propone el Gobierno y que, según él, "envía un buen mensaje de sostenibilidad fiscal" y “ataca el problema de la desigualdad en la distribución del ingreso”.