Influyentes funcionarios estadounidenses destacan el compromiso de Washington a permanecer como una potencia en el Pacífico, tras un día de conversaciones de alto nivel, en Melbourne, con autoridades australianas.
La secretaria de Estado, Hillary Clinton, dijo a los periodistas que Estados Unidos es una potencia del Pacífico y del Atlántico. Clinton y el secretario de Defensa, Robert Gates, se reunieron con el ministro de Relaciones Exteriores australiano, Kevin Rudd, y con el ministro de Defensa Stephen Smith.
Los funcionarios acordaron establecer un grupo de trabajo para explorar opciones para una cooperación militar más estrecha, posiblemente incluyendo ejercicios conjuntos y el uso de puertos, aeropuertos y bases militares australianas por parte de fuerzas estadounidenses. Gates dijo que era muy pronto para especular sobre los detalles, pero que la meta es una mejor presencia de Estados Unidos en Asia.
Geoffrey Garrett, del Centro de Estudios Estadounidenses de la Universidad de Sydney, dice que el ascenso de China también ha sido un tema de intensa discusión entre los líderes reunidos en Melbourne.
“El ascenso de China parece estar en boca de todos. Pienso que esta visita nos dice que China es importante, el involucramiento de EE.UU. en Asia es importante y Australia es aún importante”, concluyó el especialista.
Canberra es vista cada vez más, por analistas, como un intermediario entre Washington y Beijing.