Una inflación de 27,5%, la mayor de la región Latinoamericana y superior incluso a la de 2009, y seis trimestres consecutivos de contracción, son la imagen de la economía de Venezuela que al cierre del 2010 terminó como la única de América Latina sin crecimiento, tras caer un 1,9%.
En respuesta, el presidente Hugo Chávez presentó un nuevo paquete de medidas económicas que incluyen un criticado aumento del impuesto al valor agregado (IVA) al consumo y la devaluación del bolívar.
También el gobierno anunció la eliminación del sistema de dos tasas de cambio diferenciadas existentes y anunció que ya sólo habría una. Eliminó la más baja, de $2,6 bolívares por dólar, que se usaba para importaciones prioritarias como los alimentos y medicamentos, y dejó como única cotización la de $4,6 bolívares.
Al momento de hacer pública la medida, el mandatario venezolano la presentó como una "unificación" del sistema cambiario y advirtió que el gobierno no tolerará especulaciones ni alzas de precios arbitrarias.
"Quiero advertírselos desde ya”, dijo Chávez, cuyo gobierno ha cerrado negocios acusados de inflar sus precios, “vamos a meter en cintura a los especuladores y no vamos a tener ninguna clase de contemplaciones con ellos".
Chávez también acusó a la oposición de “mentir descaradamente para generar confusión".
Por su parte, la oposición, que el próximo miércoles 5 de enero de 2011 verá fortalecida su posición cuando los nuevos diputados asuman en la Asamblea Nacional, quebrando la mayoría de dos tercios que disfruta el oficialismo, sostiene que las medidas afectarán sobre todo de los pobres.
"Quien tiene que apretarse el cinturón es el gobierno", dijo el diputado electo Julio Borges, coincidiendo con la versión de los expertos que sostienen que el gobierno de Venezuela tendrá que ajustarse y probablemente recurrir a una nueva devaluación para enfrentar el enorme déficit fiscal que enfrenta.
Por otra parte, el sector petrolero, fundamental para la economía del país, según un informe del propio Banco Central de Venezuela, tuvo una caída de 2,2% durante 2010 y el sector no petrolero de 1,8%.
Sin embargo, aún el gobierno de Venezuela estima que tendrá un crecimiento del 2% en 2011, tras caer un 3,3% en 2009 y un 1,9% en 2010 según cifras del propio Banco Central de Venezuela.