El gobierno de Honduras reportó la captura de dos presuntos traficantes de personas que participaron en la caravana de migrantes que salió el pasado 30 de septiembre de San Pedro Sula hacia Guatemala, país donde entraron por la fuerza, en un intento por llegar hasta Estados Unidos.
De acuerdo con Julián Hernández, director nacional de Servicios Policiales Fronterizos (DNSPF), ambos detenidos fueron identificados como miembros de “una red de crimen organizado dedicada a la trata y tráfico de personas” y que su captura es "producto de un proceso de investigación".
La caravana fue disuelta en Guatemala, país que capturó y retornó a muchos a Honduras por considerar que la migración en masa, además de ilegal, constituía un riesgo sanitario.
Hernández detalló que desde el 2017 a la fecha las capturas de traficantes de personas, más conocidos como "coyotes", se han incrementado significativamente. Explicó que solo en lo que va de este año se han detenido a 120 personas por ese delito.
La directora del Instituto Nacional de Migración (INM), Carolina Menjívar, declaró que al 6 de octubre, fecha en que concluyó el retorno de hondureños que participaron en la caravana, el Sistema de Control Biométrico Nacional reportó el ingreso de 1.517 hondureños, incluyendo 498 menores de edad y 21 personas reincidentes en este tipo de movilizaciones con las que buscan llegar a territorio estadounidense.
"Como lo dijimos al inicio de esta movilización, el único camino seguro que tenían los migrantes era el retorno a casa después de una travesía sin éxito. Producto de la pandemia los países están implementando medidas más restrictivas en sus fronteras", señaló.
Menjivar informó que Corinto, Agua Caliente y El Florido, puestos fronterizos con Guatemala, han permanecido abiertos las 24 horas para hacer la recepción de todos los ciudadanos hondureños, principalmente de los que habían sido víctimas del tráfico de personas.
Más restricciones migratorias
La vicecanciller para Asuntos Consulares y Migratorios, Nelly Jerez, a través de un comunicado de prensa hizo un llamado a los hondureños para que eviten la migración irregular.
Recordó que hoy más que nunca las medidas migratorias se han incrementado, un ejemplo claro es que ante el ingreso irregular de la caravana, Guatemala prometió detener y devolver a los integrantes, además la nación vecina declaró toque de queda en los municipios de la ruta migratoria.
México por su lado advirtió del despliegue de fuerzas de seguridad para frenar a la caravana y estableció penas de 5 a 10 años de cárcel para aquellos que además de entrar de forma irregular incumplieran con los protocolos sanitarios implementados por este país para frenar el COVID-19.