El embajador de Estados Unidos, Ronald Johnson, entregó el miércoles al ministro de Salud de El Salvador Francisco Alabí un donativo que consiste en tres congeladores de alta gama y 1.720 purificadores de agua como soporte a la lucha contra la COVID-19 y las necesidades creadas por las tormentas tropicales Amanda y Cristóbal.
Los frigoríficos permitirán que el Ministerio de Salud (MINSAL) pueda almacenar hasta 5.000 pruebas de COVID-19 y los purificadores darán acceso al agua potable a aquellas familias afectadas por la tormenta Amanda y Cristóbal.
De acuerdo con un comunicado emitido por la embajada de EE.UU. en El Salvador los donativos se lograron a través del Programa de Asistencia Humanitaria (HAP) del Comando Sur de Estados Unidos (SOUTHCOM).
“El programa HAP ha estado apoyando al Gobierno de El Salvador mediante la donación de equipos y kits de protección personal esenciales para mitigar el riesgo de COVID-19 y también para apoyar a las personas afectadas por las tormentas tropicales Amanda y Cristóbal” explicó Johnson.
Por su parte el ministro de salud de El Salvador dijo que el equipo fortalece la capacidad del ministro para “almacenar por mucho más tiempo las pruebas PCR que se realizan para identificar el COVID-19", y agradeció el apoyo.
Durante la entrega el embajador destacó que EE. UU., “es el socio y aliado número uno de El Salvador” y que su relación va más allá, ya que al comparten una visión en seguridad, democracia y prosperidad económica. Además de que “decenas de miles de ciudadanos estadounidenses también viven aquí en El Salvador”, citó.
Johnson aprovechó la entrega para recalcar que Estados Unidos tiene un especial interés en que El Salvador sea un país “democrático estable, seguro y próspero”. Además, mencionó que este país está comprometido a apoyarlo en la lucha contra el coronavirus y en sus esfuerzos de recuperar su economía, ampliar la seguridad ciudadana y crear una oportunidad para que los salvadoreños mejoren su nivel de vida.
(con información de Enrique López)