El viernes fueron seleccionados cinco jurados suplentes más en el juicio por falsedad documental contra Donald Trump en Nueva York, y es probable que los argumentos iniciales comiencen el lunes en el primer caso penal iniciado contra un expresidente de Estados Unidos.
Siete hombres y cinco mujeres formaron parte del jurado el jueves para escuchar las pruebas en el primer caso penal iniciado contra un ex presidente de Estados Unidos.
El jurado está compuesto por dos abogados, seis personas que trabajan en empresas, dos que trabajan en el ámbito educativo, un trabajador de la salud y un ingeniero. Ninguno de ellos ha sido identificado públicamente.
Algunos de los jurados reconocieron ante el juez de la Corte Suprema de Nueva York Juan Merchan y los abogados defensores de Trump que en los últimos años habían expresado opiniones negativas sobre el expresidente de 77 años, pero todos dijeron que podían dejar esas opiniones a un lado y juzgar el caso de manera justa. Varios dijeron que apenas siguen las noticias del día.
También se eligió un jurado suplente el jueves, y Merchan señaló que quiere agregar cinco suplentes más para escuchar testimonios y que estén disponibles para reemplazar a cualquier jurado que esté incapacitado o que de otro modo necesite ser sustituido.
Los suplentes sólo participarían en las deliberaciones del jurado y ayudarían a decidir el veredicto si terminan en el jurado como reemplazo en lo que podría ser un juicio de seis semanas.
El caso involucra en términos generales acusaciones de que Trump, el presidente número 45 de Estados Unidos, planeó en 2016, justo antes de su exitosa campaña a la Casa Blanca, ocultar pagos de dinero a dos mujeres para encubrir sus afirmaciones de supuestas relaciones extramatrimoniales con él.
Los fiscales sostienen que Trump buscaba seguir ofreciendo información comprometedora sobre su vida privada a los votantes, justo antes de que votaran hace ocho años.
Trump, quien fue presidente de 2017 a 2021 y es el presunto candidato presidencial republicano en las elecciones del 5 de noviembre de este año, ha negado los asuntos y los 34 cargos de delitos graves en la acusación presentada en su contra hace un año.
De ser declarado culpable, podría recibir una pena de prisión de hasta cuatro años.
Merchan, los fiscales y los abogados defensores de Trump pasaron horas durante tres días esta semana preguntando a los posibles miembros del jurado sobre sus opiniones sobre Trump.
Cuando se eligió al duodécimo jurado, Merchan declaró: "Tenemos nuestro jurado".
El procedimiento
El juez y los abogados interrogaron a los miembros del jurado sobre cómo consumían las noticias del día, dónde trabajaban y, específicamente, si podían juzgar de manera justa a Trump, una celebridad neoyorquina y magnate inmobiliario durante años antes de ingresar a la política en 2015.
Docenas de posibles miembros del jurado, cuyos nombres fueron extraídos de las listas de registro de votantes en la ciudad fuertemente demócrata que votó rotundamente contra Trump en sus campañas de 2016 y 2020, le dijeron inmediatamente a Merchan que no podían emitir un veredicto imparcial y fueron desestimados.
Merchan desestimó a algunos posibles miembros del jurado que consideró -basándose en sus respuestas en el tribunal o en publicaciones en las redes sociales que denigraban a Trump- que no podían juzgar el caso de manera justa.
Tanto los fiscales como los abogados de Trump tenían 10 impugnaciones perentorias disponibles que podían utilizar para mantener fuera del jurado a los candidatos que no les agradaban.
El límite de impugnaciones entró en juego al final de la selección del jurado, en detrimento de Trump.
Cuando se le preguntó a una posible miembro del jurado qué sentía acerca de Trump, dijo que no tenía opiniones firmes sobre él, pero agregó: "No me gusta su personalidad, cómo se presenta en público".
Más tarde el miembro elegido explicó: "No me agradan algunos de mis compañeros de trabajo, pero no trato de sabotear su trabajo".
Los abogados de Trump intentaron mantenerla fuera del jurado, objetando su selección "por una causa", pero Merchan negó su desafío.
En ese momento, los abogados de Trump ya no tenían impugnaciones perentorias. La mujer forma parte del jurado, que prestó juramento ante Merchan.
Aunque los nombres de los posibles miembros del jurado no se han hecho públicos para proteger sus identidades y seguridad, los abogados tenían una lista de ellos. El personal de apoyo de Trump examinó minuciosamente los nombres para ver qué mensajes anti-Trump en las redes sociales pudieron haber publicado en los últimos años.
Trump a menudo ha atacado a Merchan en sus publicaciones en las redes sociales y calificó el caso de “interferencia electoral” mientras busca recuperar la presidencia.
Los fiscales han sostenido que Trump ha violado varias veces la orden de silencio de Merchan que le prohibía menospreciar a participantes clave en el caso, aunque el juez se excluyó del edicto.
Merchan ha programado una audiencia la próxima semana para escuchar las demandas de los fiscales de que Trump sea declarado culpable de desacato al tribunal y multado. Trump ha negado haber actuado mal.
El expresidente ha observado el proceso desde la mesa del acusado, flanqueado por sus abogados, tomando algunas notas y ocasionalmente mirando a los posibles miembros del jurado. Pareció quedarse dormido en algunos momentos el lunes y martes antes de volver a ponerse alerta.
Con el tiempo, podría subir al estrado de los testigos para defenderse, dependiendo de cómo él y sus abogados vean pruebas de los fiscales en el caso.
Dado que Trump debe comparecer ante el tribunal, es casi seguro que esto limitará su tiempo en la campaña electoral mientras se postula por segundo ciclo electoral consecutivo contra el presidente Joe Biden, un demócrata. En un día libre para el juicio, Trump se dirige a Carolina del Norte para un mitin el sábado por la noche.
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