El estadounidense Rezwan Ferdaus, de 26 años, fue arrestado en Boston, Massachusetts, acusado de conspirar para dañar o destruir el Pentágono y el Capitolio en Washington, usando un avión a control remoto cargado con explosivos plásticos.
El departamento de Justicia de Estados Unidos dijo que Ferdaus, también fue acusado de intentar proveer apoyo y recursos a una organización terrorista extranjera, especialmente al-Qaeda, para atacar a soldados estadounidenses en el exterior.
Ferdaus fue arrestado tras una operación encubierta.
Las autoridades dicen que Ferdaus comenzó a planear una guerra santa contra Estados Unidos a comienzos de 2010.
Los investigadores indicaron que el público nunca estuvo en peligro por los artefactos explosivos, que eron controlados por agentes encubiertos del FBI.