Un buque hospital de la Marina de Guerra de Estados Unidos regresó a casa tras una misión de 11 semanas en la que su tripulación atendió a miles de personas en Centro y Sudamérica, incluyendo migrantes venezolanos que huyeron de la crisis en su país.
Kevin Buckley, oficial a cargo de operaciones médicas del USNS Comfort, dijo el martes que durante la misión se atendieron 26.000 personas por problemas de salud como hernias, cataratas y otros males.
Buckley habló en el muelle de la Estación Naval Norfolk, en Virginia, puerto base del USNS Comfort.
La misión prestó servicios en Colombia, Ecuador, Perú y otros países, donde se han refugiado miles de venezolanos desplazados por la crisis política y económica de su país.
Muchos venezolanos están buscando atención médica desesperadamente y abandonaron su país debido a que no podían ver doctores ni comprar medicamentos. Un informe reciente calcula que unos 20.000 doctores han salido de su país desde el 2012.
El USNS Comfort también visitó Honduras.