La auditoría de la Organización de Estados Americanos (OEA) a las elecciones en Bolivia ya comenzó, en medio de un convulso clima, protestas violentas, al menos dos fallecidos y hasta la exigencia de que se anulen los resultados y se convoquen nuevos comicios.
El mecanismo que inció el jueves busca conocer si hubo fraude a favor del presidente Evo Morales, que ha denunciado la oposición. La misión de la OEA está integrada por unos 30 especialistas entre abogados electorales, estadísticos y peritos informáticos.
El embajador estadounidense ante la OEA, Carlos Trujillo, reafirmó el compromiso del país en las labores que la misión observadora realiza en Bolivia: “Estados Unidos apoya el trabajo y los hallazgos de la misión de observación #OAS a las elecciones bolivianas del 20 de octubre”.
Trujillo indicó que es menester una vía libre dentro de Bolivia al grupo enviado, para que “tenga el acceso necesario para completar su misión. Hacemos un llamado a todas las partes a abstenerse de la violencia”.
El informe con los resultados de la auditoría deberá estar listo en un plazo de entre 10 y 12 días.
¿Cómo se pactó la auditoría de la OEA en Bolivia?
El gobierno de Bolivia acordó esta semana con la OEA hacer una auditoría de carácter "vinculante" a las elecciones que dieron un polémico triunfo al presidente Evo Morales, en busca de una salida a las protestas que continúan en las calles del país.
"Hemos concluido los acuerdos a ser firmados entre Bolivia y la Organización de Estados Americanos (OEA) para que se pueda realizar la auditoria integral a las elecciones generales del 20 de octubre", anunció en rueda de prensa el canciller boliviano, Diego Pary.
En medio de la crisis que no cesa, Morales ha pedido: "Que se deje de lado la instigación al odio, al racismo y a la confrontación y que el Ministerio Público investigue la violencia registrada en el país. No tenemos nada que ocultar, dejemos que la auditoría internacional a cargo de expertos verifique si hubo o no fraude".
¿Qué dice la oposición?
El principal rival político de Morales, Carlos Mesa, no reconoce la auditoría, por estar pactada entre gobierno y OEA sin haber dado voz a los que como él denuncian el fraude.
Mesa culpó a militantes del MAS, el partido del presidente Morales, de las dos muertes esta semana en la ciudad boliviana de Montero durante las protestas.
La oposición y los movimientos cívicos contrarios al oficialismo ya dejaron de pedir una segunda vuelta entre Morales y el expresidente Mesa, y están solicitando que se anulen las elecciones, renuncie el jefe de Estado y se convoquen nuevos comicios.
¿Seguirán las protestas?
Morales ha pedido que se suspendan las manifestaciones hasta conocer el informe de la OEA, que comenzó el jueves y debe durar entre 10 y 12 días.
"Pido a quienes están en paro y bloqueo levantar (la medida) y dar cuarto intermedio en sus movilizaciones hasta que la OEA y delegados de tres países den su informe correspondiente", dijo Morales.
Mesa por su lado ha agradecido el respaldo y pedido a sus seguidores que se mantengan exigiendo que se respete el voto, pero a la vez les ha manifestado que "que se replieguen, que no respondan con violencia".
Muchos bolivianos que rechazan la auditoría de la OEA han dicho se mantendrán en las protestas en todo el país.
En Santa Cruz, el presidente del Comité Cívico, Luis Fernando Camacho, llamó a resistir con el paro nacional, bloqueos y movilizaciones, hasta conseguir que el presidente Evo Morales renuncie a su cargo.
"Cuando hablamos de la renuncia de Evo Morales, el nuevo proceso electoral sin la participacion de Evo Morales y tercero tiene que haber un nuvo tribunal, pero la renuncia tiene que ser inmedita", dijo Camacho.
En seis regiones se organizaron cabildos masivos que determinaron rechazar la tregua planteada por el presidente Morales y llamar a nuevos comicios con otro Tribunal Supremo Electoral.
(Con información de Fabiola Chambi)