El vicepresidente Joe Biden retomó el tema de la violencia armada, al asegurar, desde la Casa Blanca, que su gobierno progresa en las tareas que se le encargaron poco después de la masacre de la escuela primaria Sandy Hook.
El vicepresidente informó sobre el avance de 21 de las 23 acciones ejecutivas ordenadas por Obama, aunque por supuesto que la principal, la de aprobar una ley sobre control de armas, ha fracasado en el Congreso.
La intervención de Biden, mientras Obama se encuentra de viaje en Europa, tiene la intención de mantener la presión sobre los senadores que decidieron en abril en contra de expandir la revisión de antecedentes para los potenciales compradores de armas.
Por el momento ningún senador ha cambiado de posición como para hacer la aprobación más probable, aunque la Casa Blanca dice que están trabajando en lograr un compromiso con ellos.
Además de preparar a las escuelas ante un posible ataque armado, Biden aseguró que el programa incluye una guía de preparación para las escuelas y las iglesias en caso de un tiroteo, un tornado, un huracán, o cualquier otro desastre que afecte esas instituciones.
Las dos acciones que menos progreso han tenido son una regulación que obligaría a las compañías aseguradoras a cubrir la salud mental como cualquier otro beneficio, la cual estaría lista para fines de año, y lograr la confirmación del nuevo director de la Oficinia de Alcohol, Tabaco, Armas de fuego y Explosivos, ATF, que está empantanada en el Senado.
El vicepresidente informó sobre el avance de 21 de las 23 acciones ejecutivas ordenadas por Obama, aunque por supuesto que la principal, la de aprobar una ley sobre control de armas, ha fracasado en el Congreso.
La intervención de Biden, mientras Obama se encuentra de viaje en Europa, tiene la intención de mantener la presión sobre los senadores que decidieron en abril en contra de expandir la revisión de antecedentes para los potenciales compradores de armas.
Por el momento ningún senador ha cambiado de posición como para hacer la aprobación más probable, aunque la Casa Blanca dice que están trabajando en lograr un compromiso con ellos.
Además de preparar a las escuelas ante un posible ataque armado, Biden aseguró que el programa incluye una guía de preparación para las escuelas y las iglesias en caso de un tiroteo, un tornado, un huracán, o cualquier otro desastre que afecte esas instituciones.
Las dos acciones que menos progreso han tenido son una regulación que obligaría a las compañías aseguradoras a cubrir la salud mental como cualquier otro beneficio, la cual estaría lista para fines de año, y lograr la confirmación del nuevo director de la Oficinia de Alcohol, Tabaco, Armas de fuego y Explosivos, ATF, que está empantanada en el Senado.