El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, sostuvo una conversación en línea con Juan Guaidó el miércoles, día inaugural de la IX Cumbre de las Américas, cita a la que el mandatario estadounidense no ha invitado formalmente al líder opositor pese a ratificarle como "presidente interino" de Venezuela.
"El presidente Biden conversó hoy con el presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, para subrayarle el reconocimiento y apoyo de Estados Unidos a la Asamblea Nacional elegida democráticamente en 2015 y de Guaidó como presidente interino", señaló la Casa Blanca en un comunicado.
Asimismo, el mandatario estadounidense le "expresó su apoyo a las negociaciones lideradas por Venezuela como el mejor camino hacia una restauración pacífica de las instituciones democráticas, elecciones libres y justas y respeto por los derechos humanos y las libertades fundamentales de todos los venezolanos”.
Guaidó, quien en 2018 fue designado por la Asamblea Nacional como presidente de Venezuela, ha sido reconocido por más de medio centenar de países.
Según la Administración, ambos políticos “discutieron el papel que pueden desempeñar Estados Unidos y otros socios internacionales para apoyar una solución negociada a la crisis de Venezuela”.
Más "presión multilateral"
En tanto, la presidencia del gobierno interino informó que Guaidó hizo algunas sugerencias al mandatario estadounidense enfocadas en las exigencias al gobierno de Maduro.
"El presidente Guaidó reafirmó la importancia de calibrar permanentemente una presión multilateral internacional liderada por EEUU, orientada a una salida negociada a la crisis que derive en elecciones libres, justas y verificables; la liberación de todos los presos políticos; y la restauración de la libertad, la democracia y el progreso para los millones de venezolanos víctimas de la dictadura de Nicolás Maduro", señaló presidencia en un comunicado.
Guaidó enfatizó "la importancia de mantener la firmeza contra el autoritarismo global representado por Nicolás Maduro, en Venezuela; Miguel Díaz-Canel, en Cuba; y Daniel Ortega, en Nicaragua, cuyas alianzas con Rusia, Irán, y China ponen en riesgo la paz, la estabilidad y la seguridad del hemisferio".
La negativa de Estados Unidos, como anfitrión de la cumbre, a invitar al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro -así como a los de Nicaragua y Cuba- despertó la curiosidad sobre si Washington le brindaría algún espacio a la oposición venezolana.
Interrupción de los diálogos de paz
Las rondas de diálogo entre oposición y oficialismo que tenían lugar en la capital mexicana se vieron interrumpidas en octubre de 2021. El gobierno de Maduro actuó en respuesta por la extradición a Estados Unidos del empresario colombiano Alex Saab, quien permanecía detenido Cabo Verde desde 2020.
Las conversaciones de paz buscan un acuerdo para la realización de elecciones libres. Guaidó es reconocido por más de 50 países como el líder legítimo de Venezuela.
En marzo de este año una delegación enviada por la Casa Blanca viajó a Caracas a reunirse con el oficialismo.
El viaje vino como parte de un intento estadounidense para aislar al presidente ruso Vladimir Putin, sancionado por EEUU y Europa como consecuencia de la guerra con Ucrania. Algunos analistas también ven a Venezuela, sancionada por Estados Unidos, como una posible fuente alternativa de suministros de petróleo en caso de que Washington intente restringir los envíos de energía de Moscú, reportó entonces la agencia Reuters.
Más temprano el martes, el asesor de Seguridad Nacional para la Casa Blanca, Jake Sullivan, al anunciar el diálogo entre los dos políticos comentó la postura estadounidense de dejar que sean las partes involucradas las que decidan la toma de decisiones. "Todavía creemos que hay margen para que eso suceda. Pero en última instancia, dependerá de las dos partes hacer que suceda", zanjó Sullivan.
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