Una comisión especial de la Cámara de Representantes de Estados Unidos divulgó este martes un largamente esperado informe sobre el ataque terrorista en Bengasi, Libia, en el que culpan al ejército por responder de manera lenta para enviar ayuda.
El mortal ataque tuvo lugar el 11 de septiembre de 2012 cuando Hillary Clinton era secretaria de Estado, y tuvo como resultado la muerte de cuatro estadounidenses incluyendo al embajador Chris Stevens .
El informe fue presentado por el presidente de la Comisión Especial sobre Bengasi, el republicano Trey Gowdy, reviviendo un controversial tema político a menos de cinco meses de las elecciones presidenciales.
El informe final de 800 páginas no parece mostrar nueva evidencia sobre la culpabilidad de Clinton en los ataques de 2012 y de hecho, Gowdy dice que esa no era la finalidad de la comisión, como los demócratas aseguran.
"Las conclusiones que saque el publico son cuestión de ellos", dijo sobre el involucramiento de Clinton, ahora candidata a la presidencia.
Gowdy dijo, en cambio, que el informe registra los "frenéticos intentos" de quienes sufrían el ataque por aguantarlo con la esperanza de ser salvados, pero que en ningún momento "nada pudo llegar a Bengasi porque nada fue enviado a Bengasi".
"Creyeron que se iba a mover cielo y tierra para rescatarlos, pero eso no sucedió", añadió el miembro de la Comisión, Peter Roskam.
El analista y experto en Ciencias Políticas, Carlos Indacochea, analiza el tema en esta entrevista con la Voz de América y afirma que el informe no responsabiiza a Hillary Clinton por acciones de Estado y le permite avanzar en su campaña política.
La comisionada Martha Roby fue más allá, al acusar al gobierno de que mientras los diplomáticos en Libia estaban bajo fuego "Washington se movía a paso de tortuga".
Los hechos, según Roby, demuestran "incompetencia, indiferencia o ambos".
El informe presenta un panorama de una tormenta perfecta de inercia burocrática, una rápidamente deteriorada situación de seguridad en Libia e inadecuados recursos en los meses previos al asesinato del embajador Stevens y otros tres colegas.
De acuerdo con el informe, la afirmación de el ataque fue generado por un video anti-musulmán fue creada en Washington por funcionarios de la administración Obama y no refleja informes de testigos ni informes en tiempo real de los estadounidenses bajo ataque.
Clinton dijo a la Comisión el año pasado que ella estaba al tanto de los peligros en Libia, pero “no había inteligencia factible” que indicara un planeado ataque.
El informe indica que había datos de inteligencia disponibles sugiriendo que sí era posible un ataque y que Clinton y un alto asesor suyo, Patrick Kennedy, debieron haberse dado cuenta de los riesgos que significaban los grupos extremistas para la misión en Bengasi.
Los demócratas en la Comisión se negaron a trabajar en el reporte final y acusaron a los republicanos de derrochar el dinero de los contribuyentes con un informe que no contiene nada nuevo que no se haya dicho antes.
Colaboración con la entrevista de Gioconda Tapia Reynolds