Un barco tipo pesquero con 44 turistas a bordo, de los cuales 27 podrían ser estadounidenses, quedó atrapado en una tormenta y se hundió frente a la península de Baja California en México, causando la muerte de una persona y dejando a seis desaparecidas, según autoridades mexicanas.
Los funcionarios indicaron que hay una cifra todavía no confirmada de supervivientes, ya que continúan los esfuerzos por encontrar a más personas con vida.
La embarcación zarpó el sábado 2 de julio de 2011 desde el puerto de San Felipe en el mar de Cortéz pero se encontró con una tormenta eléctrica y zozobró el día siguiente, dijeron funcionarios portuarios y de la Armada.
Según personal de la Guardia Costera Benny Minton, un helicóptero fue enviado “para asistir en las tareas de rescate", aunque fuertes vientos y constantes amenazas de lluvia dificultaban las tareas.
La embarcación, llamada Erik, estaba alrededor de 140 kilómetros al sur de San Felipe, un popular destino de vacaciones y centro de pesca localizado al sur de Mexicali.
De acuerdo a un aviso en internet, Erik había estado operando en el mar de Cortéz desde 1989 y podía transportar hasta 42 personas.