Aunque la estrella brasileña, Ronaldinho Gaúcho, no es jugador del Barcelona de España desde 2008, su ex estadio, el Camp Nou, lo recibió como héroe en el partido que disputó vistiendo la camiseta de su actual club, el Milan de Italia.
A ritmo de samba y batucada “Ronnie” fue ovacionado con cada jugada en la que hizo recordar sus mejores momentos como jugador del Barca, equipo al que llegó en el 2003.
A pesar de que al final los fanáticos, que colmaron hasta el último hueco del estadio, celebraron la victoria del equipo blaugrana, que consiguió superar al Milán en penales, luego de igualar en el tiempo regular por la mínima, fue el regreso de Ronaldinho lo que en el fondo puso el ambiente del encuentro.
El Barcelona se llevó el trofeo Joan Gamper en un partido que también sirvió para que David Villa, la contratación estrella de este equipo para esta temporada, se estrenara con su primer gol como jugador culé, mientras que fue el italiano Inzaghi quien le puso drama al encuentro con un auténtico golazo para alargar las acciones hasta la pena máxima.
Pinto, el segundo portero del Barcelona, tuvo una noche al estilo Casillas, y paró tres de los cuatro penaltis del equipo italiano en la tanda de desempate, incluido el disparo del experimentado jugador holandés Clarence Seedorf.
El Barcelona sigue disfrutando de las mieles de ser el mejor equipo del mundo sin que aún llegue otro club que lo haga despertar de este grandioso sueño.
