En medio de las criticas que el gobierno de Estados Unidos enfrenta por los altos precios de la gasolina, el presidente Barack Obama, volvió a presionar por su política energética este jueves 15 de marzo de 2012, durante una visita a un universidad local en Largo, Maryland, en el área metropolitana de Washington.
Obama dijo a los estudiantes que para que el país avance hay que cambiar de estrategia y ponerse en el camino del verdadero futuro energético sostenible e instó a presionar al Congreso para lograrlo.
"Necesito que todos ustedes hagan escuchar sus voces, llamen por teléfono, escriban correos electrónicos, manden cartas, dejen saber a sus legisladores su opinión", solicitó el presidente Obama
El mandatario instó a reclamar ante los legisladores para que "hagan lo correcto, díganles que vamos a ganar esta batalla, que vamos a combinar nuestra creatividad, nuestro optimismo, nuestro poder intelectual, el poder de nuestros hombres y mujeres. Díganles que sí podemos, que vamos a construir una economía que dure y que vamos a hacer de este el siglo de Estados Unidos, igual que el siglo anterior", aseguró Obama en un encendido discurso.
En las últimas semanas Obama ha visitado varios estados para discutir las metas energéticas de su gobierno y para promover las maneras en que Estados Unidos pueda reducir las importaciones de petróleo extranjero e incrementar la producción doméstica.
La presión del precio de los combustibles
Un día antes, durante su encuentro con el primer ministro británico, David Cameron, el presidente estadounidense discutió las posibles estrategias para enfrentar el aumento en el precio de los combustibles.
Una de las alternativas que hizo parte de la conversación entre ambos líderes, según informa Reuters, fue la de liberar parte de las reservas de petróleo de emergencia -Reservas Estratégicas de Petróleo-.
Los altos precios de la gasolina están afectando los niveles de popularidad de Obama en un año electoral y en momentos en que la economía muestra señales de recuperación.
Incluso la inflación, medida por el aumento de los precios al consumidor, con la excepción de la gasolina, en general se ha mantenido controlada. Hasta el momento, el aumento del precio de los combustibles no ha impactado el precio de otros productos, ni la confianza del consumidor.
En lo que va de 2012, los de referencia del petróleo han subido un 16%, impulsados por los temores generados por las sanciones europeas y estadounidenses sobre las exportaciones de crudo de Irán y la situación de conflicto en países productores como Sudán y Siria.