Trabajadores de emergencia de Estados Unidos recuperaron el lunes cinco cuerpos más de entre los escombros que dejó el huracán Dorian en Bahamas, y señalaron que prevén encontrar más víctimas una semana después del paso de la devastadora tormenta.
En tanto, los residentes también inspeccionaban los escombros con el objetivo de rescatar las pocas posesiones que quedaron intactas tras el azote de la tormenta de categoría 5 que, de acuerdo a los conteos oficiales del fin de semana, ha cobrado la vida de por lo menos 44 personas.
Miembros del departamento de bomberos de Gainesville, Florida, trabajaban entre los restos de “El Lodazal”, la principal comunidad de inmigrantes haitianos en Bahamas.
“Probablemente hemos revisado, en el mejor de los casos, la décima parte de esta área, y hasta el momento hemos encontrado cinco restos humanos”, dijo Joseph Hillhouse, subjefe del equipo de Rescate del Departamento de Bomberos de Gainesville. “Diría que, basándonos en la muestra, vamos a encontrar más”.
Después de que los estadounidenses recuperaron los cuerpos, la policía y las autoridades médicas de Bahamas intervinieron para realizar las necropsias correspondientes y trasladar los restos desde la Isla Ábaco, en el noroeste de Bahamas, a la capital Nasáu, en el sur del archipiélago.
“Aún hay más cuerpos”, dijo Genoise Arnold, residente de “El Lodazal” y quien aseguró que al menos tres de sus vecinos fallecieron en la tormenta.
Arnold dijo que uno de sus vecinos se aferró a un árbol durante la tormenta y fue arrastrado por las inundaciones que arrasaron con el vecindario. Otros quedaron atrapados bajo sus viviendas después de que los potentes vientos las hicieran añicos, dejando a los residentes expuestos.
Las enormes pilas de escombros que dejó la tormenta son un obstáculo para los equipos de búsqueda y rescate, que no pueden utilizar retroexcavadoras ni equipo pesado para buscar más restos. Por lo tanto, el proceso de recuperación e identificación avanza a paso lento.