Tal como lo anunció en 2010, Google ya tiene casi listo su automóvil con un piloto automático capaz de guiarse a partir de los mapas del ‘Gigante de Internet’. El prototipo fue probado en California por Steve Mahan, un hombre en situación de discapacidad visual.
Mahan, quien perdió la capacidad en un 95%, fue el elegido para viajar a bordo del Toyota Prius adaptado por Google para conducirse solo a partir de órdenes sonoras. La compañía le permitió hacer un recorrido por la ciudad y luego publicó el video en YouTube.
"Esto me daría la independencia y la flexibilidad para ir a lugares donde tengo que ir y quiero ir cuando necesite hacer cosas", dijo con notable alegría Steve Mahan mientras recorría la ciudad en el automóvil, paró en una tienda de comidas rápidas para hacer su pedido y se estacionó en una lavandería para recoger ropa.
En el video, publicado con el título de "Self-Driving Car Test: Steve Mahan", se observa cómo el timón del vehículo se mueve de forma autónoma y con total precisión con tan solo una que otra orden del copiloto.
El vehículo, equipado con un sistema de radares, circuló cumpliendo las normas de tránsito mientras Mahan comía tranquilamente.
La empresa no entregó detalles sobre cuándo se realizó la prueba, sin embargo precisó que el auto recorrió cerca de 225.000 kilómetros sin conductor al volante, aunque siempre estuvo bajo supervisión y en "una ruta cuidadosamente programada".
Mahan, quien perdió la capacidad en un 95%, fue el elegido para viajar a bordo del Toyota Prius adaptado por Google para conducirse solo a partir de órdenes sonoras. La compañía le permitió hacer un recorrido por la ciudad y luego publicó el video en YouTube.
"Esto me daría la independencia y la flexibilidad para ir a lugares donde tengo que ir y quiero ir cuando necesite hacer cosas", dijo con notable alegría Steve Mahan mientras recorría la ciudad en el automóvil, paró en una tienda de comidas rápidas para hacer su pedido y se estacionó en una lavandería para recoger ropa.
En el video, publicado con el título de "Self-Driving Car Test: Steve Mahan", se observa cómo el timón del vehículo se mueve de forma autónoma y con total precisión con tan solo una que otra orden del copiloto.
El vehículo, equipado con un sistema de radares, circuló cumpliendo las normas de tránsito mientras Mahan comía tranquilamente.
La empresa no entregó detalles sobre cuándo se realizó la prueba, sin embargo precisó que el auto recorrió cerca de 225.000 kilómetros sin conductor al volante, aunque siempre estuvo bajo supervisión y en "una ruta cuidadosamente programada".