Las solicitudes de asilo de venezolanos han aumentado desde junio en Ecuador, ya se contabilizan 4.003 frente a las 1.500 que se recibieron en el 2017.
La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados, ACNUR, considera que Ecuador es un país que a pesar de ser pequeño tiene políticas migratorias muy buenas que acogen a los extranjeros, que demuestra solidaridad y el país sale beneficiado con esto. Maria Clara Martín, representante de ACNUR en Ecuador indicó: “El Ecuador si está preparado y está reforzando su preparación y ahora vemos cada vez más gente que llega por cada vez más problemas. Problemas de salud”.
La reacción del gobierno ecuatoriano ha sido positiva y con apertura. El presidente Lenin Moreno señaló que un migrante no deja su patria por voluntad propia.
“Se desplazan buscando un destino incierto porque nadie abandona la tierra amada por voluntad propia. Y lo menos que podemos hacer nosotros como seres humanos solidarios que somos los ecuatorianos es darles toda nuestra protección”, dijo Moreno.
Se conoce por cifras del Ministerio del Interior que 547.140 venezolanos ingresaron hasta el 31 de julio, de los cuales abandonaron el país 458.326 por lo que aquí se habrían quedado 88.814.
Muchos permanecen con la esperanza de encontrar un puesto de trabajo. La declaratoria de estado de emergencia en ciertas poblaciones del país ofrece oportunidades para que sean atendidos en salud, seguridad y alimento mientras permanecen en el Ecuador.