Por segunda ocasión, las instalaciones de Televisa Monterrey, sufrieron un atentado de parte de personas armadas, presuntamente integrantes de la delincuencia organizada, quienes lanzaron una granada en horas de la madrugada, dejando sólo daños materiales.
La Procuraduría General de Justicia (PGJ), condenó los ataques y dijo que los periodistas tienen miedo de ejercer su profesión.
"En México, ningún periodista se siente seguro cuando grupos criminales lanzan granadas contra ellos", dijo Carlos Lauría, coordinador del CPJ para las Américas.
A su vez, la CPJ no ha determinado si el artefacto era una granada de fragmentación o bien un explosivo realizado en forma manual e instaron a que se realice una investigación.
“Los traficantes de drogas están sembrando el terror en la prensa. Le pedimos a las autoridades mexicanas que realicen una investigación y encuentren a los culpables”, señaló Lauría.
Los hechos se registraron a la madrugada en el edificio de la cadena televisiva ubicado en la calle Roberto Espinosa y José Marroquín “Pipo”.
Las autoridades mencionaron que el artefacto explosivo fue lanzado debajo de una camioneta Toyota, tipo Tacoma, con placas de circulación del estado de Nuevo León.
Los investigadores desconocen si el artefacto iba dirigido contra el dueño del mencionado vehículo, ya que es un empleado de Televisa.
Testigos de los hechos mencionaron que los presuntos responsables viajaban en una camioneta tipo pick up, desde donde lanzaron el artefacto.
Este es el segundo atentado contra la empresa televisora, ya que el pasado seis de julio del 2009, también atacaron las instalaciones con una granada.
En esa ocasión la PGR informó que el ataque fue perpetrado por un grupo de la delincuencia organizada, quienes reclamaban a la empresa por pasar sólo noticias negativas en su contra y no contra otros grupos rivales.
Hasta el momento nadie se han agenciado la responsabilidad en el atentado contra Televisa.
