La agencia de noticias Associated Press dice que el gobierno estadounidense obtuvo secretamente dos meses de datos telefónicos de muchos de sus periodistas y editores.
La vicepresidenta y editora ejecutiva de la organización, Kathleen Carroll dijo que AP se enteró de la acción después de que ocurrió.
“El viernes, recibimos un aviso del Departamento de Justicia de que había accedido a los datos de 20 de nuestras líneas telefónicas, de trabajo y personales, pertenecientes a periodistas de AP y conexiones con oficinas de AP de varios lugares”, dijo la ejecutiva
Los datos cubren un período de dos meses a comienzos de 2012 e incluyen las oficinas de AP en Nueva York, Washington y Hartford, Connecticut agregó Carroll.
“No nos han dicho lo que estaban buscando ni nos han explicado por qué no nos avisaron con anticipación”, aclaró Carroll. “Nuestros abogados nos dicen que es no solo una costumbre, sino que es requerido”.
Un informe de AP sobre el asunto dice que autoridades estadounidenses han dicho previamente que el Departamento de Justicia está realizando una investigación criminal sobre quién pudo haber proveído la información para un artículo de AP en mayo de 2012 sobre una operación de la CIA en Yemen que frustró un atentado de al-Qaeda.
Reacción de las gremiales
La Asociación de Periódicos de Estados Unidos (NAA por sus siglas en inglés) y The News Media Guild reaccionaron aireadamente contra el Departamento de Justicia de EE.UU.
"Esas acciones (del Departamento de Justicia) estremecen la conciencia estadounidense y violan la imprescindible libertad de la prensa que está protegida por la Constitución" del país, afirmó la presidenta de la NAA, Caroline Little, en un comunicado.
En términos parecidos se expresó el sindicato "The Newspaper Guild", que agrupa a periodistas estadounidenses, la cual dijo en un comunicado que "la recopilación de estos registros (telefónicos) es espantosa y supone un atentado directo contra los periodistas".
La vicepresidenta y editora ejecutiva de la organización, Kathleen Carroll dijo que AP se enteró de la acción después de que ocurrió.
“El viernes, recibimos un aviso del Departamento de Justicia de que había accedido a los datos de 20 de nuestras líneas telefónicas, de trabajo y personales, pertenecientes a periodistas de AP y conexiones con oficinas de AP de varios lugares”, dijo la ejecutiva
Los datos cubren un período de dos meses a comienzos de 2012 e incluyen las oficinas de AP en Nueva York, Washington y Hartford, Connecticut agregó Carroll.
“No nos han dicho lo que estaban buscando ni nos han explicado por qué no nos avisaron con anticipación”, aclaró Carroll. “Nuestros abogados nos dicen que es no solo una costumbre, sino que es requerido”.
Un informe de AP sobre el asunto dice que autoridades estadounidenses han dicho previamente que el Departamento de Justicia está realizando una investigación criminal sobre quién pudo haber proveído la información para un artículo de AP en mayo de 2012 sobre una operación de la CIA en Yemen que frustró un atentado de al-Qaeda.
Reacción de las gremiales
La Asociación de Periódicos de Estados Unidos (NAA por sus siglas en inglés) y The News Media Guild reaccionaron aireadamente contra el Departamento de Justicia de EE.UU.
"Esas acciones (del Departamento de Justicia) estremecen la conciencia estadounidense y violan la imprescindible libertad de la prensa que está protegida por la Constitución" del país, afirmó la presidenta de la NAA, Caroline Little, en un comunicado.
En términos parecidos se expresó el sindicato "The Newspaper Guild", que agrupa a periodistas estadounidenses, la cual dijo en un comunicado que "la recopilación de estos registros (telefónicos) es espantosa y supone un atentado directo contra los periodistas".