Altos funcionarios de inteligencia de Estados Unidos dijeron este jueves al Congreso en Washington que si Irán es atacado debido a su programa nuclear podría responder cerrando el estrecho de Ormuz a la navegación, y disparando misiles a las fuerzas estadounidenses desplegadas en la región y a sus aliados.
Prestando testimonio ante el Comité de Servicios Armados del Senado, el teniente general Ronald Burguess, jefe de la Agencia de Inteligencia de la Defensa, declaró que es improbable que Irán inicie o provoque intencionalmente un conflicto.
Las valoraciones del general ocurren en momentos en que crecen los temores en la comunidad internacional de que Israel ataque militarmente a los iraníes para frenar los planes nucleares de Teherán y en represalia por recientes atentados contra diplomáticos suyos en India, Georgia y Tailandia, de los que los israelíes culpan a Irán.
Tanto Burguess, como el Director Nacional de Inteligencia, James Clapper, dijeron a los legisladores que ellos no creen que Israel haya decidido atacar a Irán.
De acuerdo con el jefe de inteligencia, es "técnicamente factible” que los iraníes puedan fabricar un arma nuclear dentro de un año o dos si es que deciden hacerlo. A su juicio, recientes acercamientos de Teherán con diplomáticos europeos indican que los gobernantes iraníes están reconsiderando su programa atómico.
Clapper también dijo en la audiencia que algunos ataques contra objetivos de seguridad e inteligencia en Siria, específicamente en las ciudades de Damasco y Aleppo, hacen pensar que detrás de ellos podría estar la red terrorista al Qaeda.
El Director Nacional de Inteligencia apuntó que Siria posee instalaciones de armas químicas que los terroristas podrían atacar, y dio a entender que grupos de la oposición en ese país pudieran haber sido infiltrados por al Qaeda, que posee una activa red en la vecina Irak.
Según Clapper, entre las nuevas amenazas mundiales están además los ataques cibernéticos y gobiernos con regímenes dictatoriales, entre otros.
Al ser interrogado por el senador John McCain sobre el grado de peligro que entrañan las organizaciones criminales que operan en México, Clapper señaló que la violencia relacionada con el narcotráfico en ese país representa una gran amenaza para la seguridad de EE.UU.
“Siempre hay el riesgo de contagio, y esa es una de las razones por las que trabajamos estrechamente con el gobierno mexicano", indicó.
McCain puntualizó que “es hora de que coloquemos todos las opciones en la mesa”, al precisar que los recortes al presupuesto de defensa son “un gran riesgo” para Estados Unidos.
La audiencia, a la que asistieron funcionarios militares de alto rango y congresistas de ambos partidos, estuvo enfocada en el polémico programa nuclear iraní, las revueltas populares en Siria y los recientes ataques cibernéticos a portales de Internet de agencias de seguridad estadounidenses.