El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, quien contrajo COVID-19 informó el domingo que sus síntomas son leves y que está siendo atendido por los médicos.
"Lamento informarles que estoy contagiado de COVID-19. Los síntomas son leves pero ya estoy en tratamiento médico. Como siempre, soy optimista", dijo en su cuenta de Twitter. "Saldremos adelante todos".
López Obrador dijo también que estará pendiente de sus asuntos como jefe de Estado.
“Yo estaré pendiente de los asuntos públicos desde Palacio Nacional. Por ejemplo, mañana atenderé una llamada con el presidente Vladimir Putin porque, independientemente de las relaciones de amistad, existe la posibilidad de que nos envíen la vacuna Sputnik V”, añadió.
López Obrador, de 67 años, fue diagnosticado el domingo y tiene un equipo de médicos que lo están cuidando, dijo el director de epidemiología de México, José Luis Alomía Zegarra.
El presidente mexicano ha sido duramente criticado por no usar tapabocas durante la epidemia, incluso en eventos públicos y privados de los que suele subir fotos a sus redes.
México atraviesa una intensa segunda ola de la pandemia de coronavirus, especialmente en la Ciudad de México, donde los hospitales se encuentran al borde del colapso, con el 90% de sus camas de hospitales ocupadas.
Hasta la fecha, el país acumula 1.763.219 casos positivos y 149.614 muertes, según datos de la Universidad Johns Hopkins. Una campaña de vacunación está en marcha y hasta el momento se ha vacunado a más de 600.000 personas, según datos oficiales.
López Obrador dijo que esperaría su turno para recibir la vacuna, que actualmente se administra a los trabajadores de la salud directamente involucrados con pacientes de coronavirus.
La vacuna rusa no ha sido aprobada para su uso en México, pero el gobierno pretende llenar los faltantes que han dejado demoras en el suministro de las vacunas de Pfizer.
Otros presidentes latinoamericanos que han contraído el coronavirus son el brasileño Jair Bolsonaro, el guatemalteco Alejandro Giammattei, el hondureño Juan Orlando Hernández y la expresidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez. Todos se han recuperado.