Ecuador alcanzó el viernes un acuerdo técnico con el Fondo Monetario Internacional (FMI), lo que le garantiza un crédito de libre disponibilidad por 6.500 millones de dólares.
Ese organismo señaló en un comunicado que el nuevo programa se basará en dos objetivos: “proteger la vida y los medios de vida de la población y restaurar la estabilidad macroeconómica” con el propósito de garantizar la sostenibilidad de las finanzas públicas y fortalecer las instituciones nacionales para sentar las bases de un crecimiento sólido, duradero e inclusivo.
Al respecto, el presidente Lenín Moreno escribió en su cuenta de Twitter: “gran noticia para Ecuador! Llegamos a un acuerdo técnico con el FMI para acceder a 6500 millones de dólares para protección social y reactivación”.
El acuerdo, que se produjo tras cerca de cuatro meses de diálogo entre los equipos técnicos de ambos lados, establece que el monto total será entregado en partes entre este y el año 2022, a una tasa de interés del 2,9% con 10 años de plazo y cuatro de gracia.
Con este convenio el gobierno ecuatoriano podría cristalizar el plan de reestructuración, en espera desde inicios de agosto, de los bonos soberanos por 17.375 millones con cuyos tenedores Ecuador había llegado a una negociación exitosa a inicios de agosto.
Este programa de financiamiento debe ser aprobado por el directorio del FMI luego de que el gobierno ecuatoriano suscriba una carta de intención.
Este país atraviesa un agudo proceso de falta de liquidez fiscal derivado del alto endeudamiento público, una crisis económica que se vio agravada con las movilizaciones de las comunidades indígenas del año pasado en oposición a la elevación de la gasolina y finalmente por efecto de la pandemia de coronavirus.
La mala situación de la caja fiscal genera atrasos hasta por dos meses en el pago de salarios de empleados públicos, a proveedores del Estado y la suspensión de proyectos estatales.