Miles de personas desfilaron este sábado en caravanas por varias ciudades de Brasil para pedir la destitución del presidente Jair Bolsonaro por su gestión de la pandemia,. Critican también el atraso en la campaña de vacunación en el segundo país con más muertos por el coronavirus.
Convocados por partidos y organizaciones de izquierda, unos 500 vehículos recorrieron la zonas donde están situados los ministerios y otras avenidas importantes de Brasilia. Los vidrios de los autos tenían carteles donde se leían lemas como ‘Fora Bolsonaro’ (Fuera Bolsonaro), ‘Impeachment Já!’ (Impeachment Ya) o ‘Vacina para todos Já’ (Vacuna para todos Ya), según imágenes difundidas por medios locales y extranjeros.
Videos mostraron que en su recorrido usaban sus bocinas para llamar la atención.
Los asistentes protestaron también contra el fin de la ayuda de emergencia con la que 68 millones de brasileños, casi un tercio de la población, pudo sobrellevar desde abril hasta finales de diciembre los devastadores efectos de la pandemia.
Manifestaciones similares, con caravanas de varios centenares de coches, se llevaron a cabo o estaban convocadas en otras ciudades del país, como Río de Janeiro o Sao Paulo.
Bolsonaro minimizó en varias ocasiones la gravedad del coronavirus, al que llegó a calificar de “gripecita”. También cuestionó la eficacia de las vacunas y recomendó “tratamientos precoces” con medicamentos cuya efectividad no había sido comprobada.
El mandatario también desestimó las medidas de aislamiento social, por sus efectos económicos, y el uso de mascarillas.
Su gobierno ha sido ampliamente criticado por los brasileños, que alegan errores de gestión ante la crisis sanitaria y por el retardo en la vacunación, que empezó esta semana, mucho después que en otros países, y que ha tenido problemas de organización.
Medios informaron que las protestas seguirán el domingo en las principales ciudades, esta vez organizadas por organizaciones de derecha, como el Movimiento Brasil Livre (MBL) y Vem Para Rua (Ven a la calle), que apoyaron al mandatario a su llegada al poder en enero de 2019 pero que luego se desvincularon de él por su gestión de la pandemia.
A nivel nacional ya se han registrado más de 215.000 muertos, una cifra solo superada por Estados Unidos.