Fueron despedidos, les rebajaron sus salarios o renunciaron porque ya no percibían ingresos, muchas son las situaciones que impulsan a los bolivianos a optar por empleos informales ante la deseperación por mantener a sus familias luego del duro confinamiento por el coronavirus. Hoy se intenta retomar la normalidad, pero los efectos negativos aún están latentes. Informa para la Voz de América Fabiola Chambi desde Bolivia.