Desde el jueves rige en Bolivia el denominado “silencio electoral”, período de tiempo para la reflexión y en el que se prohíben los actos de campaña o cualquier llamado al voto, según disposiciones de las autoridades electorales que ultiman detalles para los comicios regionales de este domingo.
Los bolivianos elegirán a los gobernadores y legisladores de nueve departamentos, además de los alcaldes y concejales de 339 municipios, en una jornada que se desarrollará con medidas de bioseguridad por la pandemia del COVID-19.
“Ya es el momento en que los ciudadanos analizan, procesan la información y acuden a votar en un ambiente de libertad, de tranquilidad y también con las debidas medidas de protección sanitaria”, dijo el presidente del Tribunal Supremo Electoral, Salvador Romero.
Para entender cómo se configurará este escenario político a nivel local y su relación con el gobierno central, el abogado y politólogo Rolando Tellería dijo a la Voz de América que es necesario analizar las elecciones presidenciales de 2020 y el papel del partido oficialista el Movimiento Al Socialismo.
“El electorado tiene un comportamiento en elecciones nacionales y tiene otro distinto en las elecciones subnacionales, donde incluso pone en cuestión el voto duro. Por otro lado, también estas subnacionales están marcando una división y una decisión al interior del Movimiento Al Socialismo”, afirmó.
Por otro lado, uno de los observadores de la Misión Electoral de la Organización de los Estados Americanos (OEA) se reunió con actores políticos del país, entre ellos el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, y el líder de la oposición, Carlos Mesa.
También se anunció que cinco observadores del Mercosur participan en el monitoreo de los comicios el domingo.
Según la normativa, el Tribunal Supremo Electoral tiene hasta siete días para presentar los resultados oficiales por lo que no se realizará la difusión de resultados preliminares.