“Cero hambre” es el nivel al que quiere llegar el gobierno mexicano con la puesta en marcha este lunes de la Cruzada Nacional contra el Hambre, un ambicioso programa integral para atender a las comunidades más necesitadas.
De esta manera el presidente Enrique Peña Nieto cumple con una de las prioridades de su gobierno que es acabar con el hambre, la pobreza y la desigualdad social que afecta a casi el 25% de la población, según datos arrojados en 2010.
En México la hambruna mata casi al mismo número de personas víctimas de la violencia por el crimen organizado. Según datos oficiales, en 2011 murieron en México un total de 11.000 personas por desnutrición, mientras cerca de 12.000 perdieron la vida por enfrentamientos entre los cárteles de la droga.
La Cruzada Nacional Contra el Hambre no consiste en distribuir alimentos sino en trabajar de manera conjunta con organizaciones a nivel federal, local y municipal en el desarrollo de programas agrícolas, sanitarios y educativos.
"De nada sirve que haya alimentación, si no hay centros de salud, no hay médicos y no hay abasto suficiente de medicinas", afirmó la secretaria mexicana de Desarrollo Social, Rosario Robles a cargo del programa.
La primera fase se enfocará en 400 municipios y beneficiará a 7.4 millones de mexicanos que viven en extrema pobreza representando el 52 por ciento de la población.
De los municipios elegidos en 45 existe se suma un problema de violencia que será atendido con el apoyo del Ejército mexicano en la labor social y humanitaria.
De esta manera el presidente Enrique Peña Nieto cumple con una de las prioridades de su gobierno que es acabar con el hambre, la pobreza y la desigualdad social que afecta a casi el 25% de la población, según datos arrojados en 2010.
En México la hambruna mata casi al mismo número de personas víctimas de la violencia por el crimen organizado. Según datos oficiales, en 2011 murieron en México un total de 11.000 personas por desnutrición, mientras cerca de 12.000 perdieron la vida por enfrentamientos entre los cárteles de la droga.
La Cruzada Nacional Contra el Hambre no consiste en distribuir alimentos sino en trabajar de manera conjunta con organizaciones a nivel federal, local y municipal en el desarrollo de programas agrícolas, sanitarios y educativos.
"De nada sirve que haya alimentación, si no hay centros de salud, no hay médicos y no hay abasto suficiente de medicinas", afirmó la secretaria mexicana de Desarrollo Social, Rosario Robles a cargo del programa.
La primera fase se enfocará en 400 municipios y beneficiará a 7.4 millones de mexicanos que viven en extrema pobreza representando el 52 por ciento de la población.
De los municipios elegidos en 45 existe se suma un problema de violencia que será atendido con el apoyo del Ejército mexicano en la labor social y humanitaria.
