Un hombre que mató durante la noche del miércoles a nueve personas en una ciudad de Alemania cerca de Francfort fue identificado por las autoridades como un individuo de 43 años con supuestas ideas xenófobas.
El sospechoso, cuyo nombre no ha sido revelado, atacó dos bares narguiles en Hanau, donde los asistentes se reúnen para fumar tabaco de sabores en pipas de agua originarias del Oriente Medio.
La policía persiguió un vehículo utilizado para escapar de la escena de uno de los ataques hasta la dirección del propietario, donde encontraron su cadáver junto al de su madre de 71 años.
Las autoridades informaron que el individuo tenía una licencia para poseer armas de fuego y era miembro de un club de tiro.
Los fiscales federales dijeron que se hicieron cargo del caso debido a su probable motivo extremista y según el periódico Bild el sospechoso había expresado puntos de vista de extrema derecha en una confesión escrita.
Hasta ahora no se han dado a conocer detalles sobre las víctimas, pero la Confederación de Comunidades del Kurdistán en Alemania dijo que varios de los muertos eran kurdos.
Por su parte, el embajador de Turquía en Berlín, Alí Kemal Aydin, dijo a la emisora estatal TRT Haber que cinco ciudadanos turcos estaban entre los muertos.
La canciller alemana, Ángela Merkel, condenó el ataque y dijo a los reporteros que todo aparentaba que fue motivado por el “veneno” del racismo.
En Alemania viven unos tres millones de personas de origen turco, entre ellos un millón de kurdos. Recientemente se ha destapado en el país un repunte de los sentimientos antiinmigrantes debido a la desaceleración de la economía.
