Torrenciales aguaceros y fuertes vientos que azotaron gran parte de Italia han matado a 11 personas en dos días, dijeron las autoridades el martes.
Muchas de las muertes ocurrieron debido a la caída de árboles sobre automóviles y transeúntes, además de una mujer que fue sepultada por lodo cuando un alud inundó su casa cerca de Trento, en el norte del país, y un hombre que se estrelló contra las rocas cuando surfeaba en Emilia-Romagna. Las otras muertes ocurrieron en Nápoles, Liguria y Lazio.
Los vientos crearon oleajes excepcionales en Venecia el lunes, cubriendo tres cuartas partes de la ciudad por primera vez en una década. Se pronostica que el agua alcanzará niveles de hasta 105 centímetros (41,4 pulgadas) el martes, inundando 8% de la famosa ciudad de canales.
“Fue la tormenta perfecta en la cual las condiciones meteorológicas adversas contribuyeron a la situación en el mar y los vientos”, dijo el jefe de protección civil Angelo Borrelli.
Las lluvias inundaron carreteras y causaron un alud que obligó a cerrar temporalmente la carretera Brenner, que conecta Italia con Austria, al tiempo que el río Adigio a su paso por Verona creció dos metros (6 pies), pero no se desbordó. En Roma, más de 100 árboles cayeron derribados por la tormenta y los puertos sufrieron daños.
Casi 6.000 bomberos fueron enviados a retirar escombros y otros restos de caminos en todo el país. Un bombero murió al caerle encima un árbol cerca de Bolzano, en Alto-Adigio. Las escuelas fueron cerradas en varias áreas por precaución.
En Venecia
Una marea inusualmente alta inundó Venecia . Turistas y vecinos tuvieron que calzar botas altas para recorrer las calles venecianas cuando los fuertes vientos elevaron el nivel del agua a 156 centímetros (más de 5 pies) sobre el nivel del mar antes de retroceder. El agua rebasó incluso las pasarelas elevadas que se colocan en zonas inundadas, lo que obligó a retirarlas. La autoridad de transportes canceló el sistema de autobuses acuáticos salvo a las islas más alejadas.
La agencia noticiosa ANSA reportó daños e los mosaicos en el suelo de la famosa Basílica de San Marco en Venecia, donde las aguas alcanzaron 90 centímetros (35 pulgadas). Las puertas de bronce y las columnas también sufrieron daños.
Venecia suele inundarse cuando los vientos fuertes empujan el agua desde la laguna, pero los niveles del lunes fueron excepcionales. El pico fue el más alto desde diciembre de 2008, de acuerdo con estadísticas municipales.
El alcalde Luigi Brugnaro dijo que se están montando barreras bajo el agua en la laguna, las que hubieran impedido la inundación. El proyecto, apodado Moisés, está afectado por superación de costos y escándalos de corrupción.
Brugnaro dijo que pidió hablar con el premier Giuseppe Conte para destacar la urgencia del proyecto, que elevaría barreras cuando la marea llega a 109 centímetros (43 pulgadas), lo que sucede unas cuatro veces por año en Venecia.
Los habitantes y negocios suelen reforzar sus puertas con paneles de madera o metal para impedir que se inunden las plantas bajas, pero fotos en las redes sociales mostraban a los tenderos bombeando agua para tratar de proteger su mercadería.
La mayor parte de Italia está bajo alerta de inundaciones provocadas por fuertes lluvias, un problema que se ve empeorado por la falta de mantenimiento en los cauces de los ríos.
El gobernador de la región de Véneto, Luca Zaia, dijo que las inundaciones podrían alcanzar los niveles de la inundación registrada en 1966 que llenó de agua a Venecia y Florencia.