La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, se reunirá este martes con su homólogo cubano, Raúl Castro, y visitará las obras del Puerto del Mariel, que se construye con un crédito de $450 millones de dólares de su país.
La mandataria llegó la noche del lunes a La Habana y fue recibida por el canciller cubano, Bruno Rodríguez, en el marco de una gira que también incluye Haití.
Según la agenda oficial, Rousseff asistió por la mañana a una ofrenda floral en honor a José Martí en la Plaza de la Revolución.
Antes del mediodía, se reunirá con el presidente Castro donde prevé firmar acuerdos de entendimiento y cooperación bilateral. Después el mandatario cubano ofrecerá un almuerzo en honor a la visita de Rousseff en el Salón de Protocolo del Cine Club Cubanacán.
Por la tarde, la mandataria visitará las obras del Puerto Mariel, a cargo de la empresa brasileña Odebrecht y constructoras cubanas.
Según fuentes del gobierno cubano, la construcción del puerto es la mayor obra de infraestructura que lleva a cabo el gobierno de Raúl Castro.
La visita de la mandataria coincide con el acuerdo que Odebrecht y el grupo estatal cubano Azcuba, que controla la producción azucarera en el centro-sur de la isla.
Reunión con disidentes
Varios medios de la isla descartan que Rousseff tenga algún encuentro con los disidentes cubanos.
Mientras que el lunes, Elizardo Sánchez de la Comisión de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN), dijo que no esperaba “nada relevante” de la visita.
“La política exterior del gobierno democrático de Brasil sigue lastrada por una interpretación anacrónica del principio de no intervención”, dijo Sánchez en una rueda de prensa con medios extranjeros
A su vez, Maritza Pelegrino, la viuda de Wilman Villar, el disidente cubano que murió encarcelado, manifestó que continúa rechazando la versión oficial sobre el caso de su marido, al que el gobierno considera un "recluso común".
Asimismo, Amnistía Internacional instó a que la mandataria interceda por la bloguera Yoani Sánchez.
“Confiamos a que la presienta Roussef use su visita a Cuba y la creciente influencia mundial de Brasil para promover la protección de los derechos humanos”, señaló un comunicado del organismo.
El pasado 26 de enero, Sánchez confirmó a través de su cuenta en Twitter que Brasilia le había otorgado un visado para asistir el 10 de febrero en Brasil al estreno de un documental sobre la libertad de prensa en Cuba y Honduras, sin embargo, debe obtener permiso del gobierno para salir de la isla.