El nuevo presidente afgano Ashraf Ghani asumió el cargo este lunes convirtiéndose en el primer nuevo gobernante de Afganistán desde la invasión de Estados Unidos en 2001.
Bajo estrictas medidas de seguridad, delegados de todo el mundo asistieron a la ceremonia, que se realizó en el palacio presidencial en Kabul. También asistieron líderes políticos y religiosos afganos.
La delegación estadounidense estuvo presidida por el consejero de la Casa Blanca, John Podesta.
El saliente presidente Hamid Karzai entregó las responsabilidades gubernamentales después de haber asumido el cargo tras el derrocamiento del Talibán.
La toma de posesión de Ashraf Ghani marca la primera transición pacífica de poder en Afganistán.
En su discurso, Ghani hizo un llamado al diálogo. “El combate no es la solución para las diferencias políticas, probamos que las diferencias políticas pueden resolverse a través de negociaciones políticas. En consecuencia, pido a la oposición del gobierno, especialmente al Talibán y a Hezb-e-Islami que se unan a las conversaciones políticas”, dijo.
El rival electoral de Ghani, Abdullah Abdullah, también prestó juramento como el primer jefe ejecutivo, en un acuerdo de compartimiento de poder alcanzado meses después de una crisis post electoral.
